Priapismo en perros - Causas y tratamiento

El priapismo en los perros es una condición patológica caracterizada por la persistente erección del pene en ausencia de cualquier estímulo o causa sexual, lo que además dificulta la micción y predispone a un daño permanente del miembro si no se puede solucionar. En una etapa inicial, el pene se puede reintroducir de forma manual dentro del prepucio, lo que permite diferenciarlo de la parafimosis, que se produce cuando hay incapacidad de reintroducir el pene en el interior de la vaina prepucial. Es clave reconocer de forma precoz el priapismo para poder tratarlo cuanto antes y evitar secuelas y daños irreversibles en el pene de nuestros perros.

Tipos de priapismo en perros

En la especie canina, habitualmente se distinguen tres tipos de priapismo: el priapismo isquémico o de flujo bajo, el priapismo no isquémico o de flujo alto y el priapismo recidivante:

• Priapismo isquémico o de flujo bajo: es la forma más frecuente, caracterizada por una dolorosa erección de máxima rigidez y la ausencia de flujo sanguíneo cavernoso. Cuando la duración supera las 4 horas, puede comportarse como un síndrome compartimental que requiere una intervención veterinaria urgente, ya que de lo contrario podría provocar una fibrosis irreversible y disfunción eréctil permanente.
• Priapismo no isquémico, arterial o de flujo alto: es la presentación menos frecuente y se caracteriza por la entrada no controlada de flujo sanguíneo cavernoso, lo que produce una erección no dolorosa y menos rígida. Este tipo de priapismo requiere tratamiento y evaluación oportuna, pero no es una urgencia veterinaria.
• Priapismo recidivante o recurrente: se trata de un tipo poco frecuente en el que se producen episodios repetidos de erecciones prolongadas, que suelen ser del tipo isquémico. El tratamiento es individualizado según la causa.

Los perros pacientes de priapismo generalmente presentarán dolor intenso, especialmente en la gran mayoría de ocasiones afectadas por el doloroso priapismo isquémico, que se caracteriza por una erección peneana persistente. Sin embargo, en los casos de priapismo no isquémico, el dolor no es un síntoma común.

Otros signos clínicos que pueden manifestar los perros con priapismo incluyen:

• Desenvainado del pene.
• Inflamación del prepucio.
• Hiperemia o enrojecimiento del pene.
• Inflamación y enrojecimiento del prepucio (eritema).

Además, el perro manifestará inquietud y se lamerá el pene debido a la molestia o la incomodidad de la situación.

Mientras que en la especie felina se puede observar de forma secundaria a estimulación prostática, uretral, peneana o testicular, como complicación posoperatoria de orquidectomía o de forma secundaria a lesiones espinales, en la especie canina se suele producir asociado a lesiones espinales que cursen con una estimulación parasimpática del nervio pélvico. Otras causas que pueden provocar priapismo en los perros son las siguientes:

• Enfermedades de tipo vírico.
• Lesiones en la cauda equina.
• Empleo de tranquilizantes como los fenotiazínicos.
• Metástasis de algunos tumores.
• Traumas en la zona de la vejiga o perianal.

Cuando nuestro perro presenta una erección continua del pene, el cuidador puede darse cuenta rápidamente, pero es posible que no llegue a la conclusión de si se trata de priapismo o parafimosis. Esta distinción puede hacerse al intentar reintroducir el pene en la vaina prepucial; si es posible, indica parafimosis, como se mencionó en el primer apartado del artículo. Por lo tanto, el diagnóstico del priapismo canino se realiza mediante una anamnesis y un examen físico del perro, que generalmente incluye pruebas como hemograma y bioquímica sanguínea para detectar alteraciones como aumento de leucocitos, plaquetas, anemia u otros marcadores orgánicos. Además, se realiza un análisis de orina y pruebas de diagnóstico por imagen como ecografía, radiografía o resonancia magnética para detectar posibles lesiones medulares o espinales. Un angiograma o una ecografía doppler pueden ser útiles para evaluar los flujos sanguíneos y el compromiso vascular en el pene del perro afectado.

El tratamiento del priapismo en perros debe iniciarse tan pronto como se detecte el problema, especialmente si se trata de priapismo isquémico, ya que la vascularización puede estar comprometida y los perros experimentarán mayor incomodidad y dolor. En estos casos, se recomienda realizar una punción-evacuación de los cuerpos cavernosos del pene y lavado con suero fisiológico. Si esto no tiene éxito, se puede intentar la inyección de un agonista adrenérgico como primer tratamiento. En caso de fracaso, se podría optar por una segunda inyección de agonista adrenérgico.

Por otro lado, en el caso del priapismo no isquémico, si el problema no se resuelve de forma espontánea, se puede considerar la embolización selectiva de una arteria cavernosa como tratamiento.

Además de esto, es importante tratar la causa subyacente del priapismo. Se debe limpiar y desinfectar el pene para evitar infecciones si ha habido contacto con suciedad o cuerpos extraños, y si la infección ya está presente, se deben administrar antibióticos.

A pesar de los tratamientos aplicados y la corrección de la causa subyacente, en algunos casos el daño en el pene puede ser irreversible. En estas circunstancias, pueden ser necesarias medidas más drásticas como la uretrostomía perineal y la amputación del pene.

Imagen: historiasveterinarias.wordpress.com

No existen remedios caseros para tratar o aliviar el dolor del priapismo en los perros, ya que el tratamiento siempre será médico y/o quirúrgico. En casa, no se puede hacer nada por el perro en este caso más allá de mantener el pene desinfectado con suero fisiológico.

Si observas que tu perro mantiene la erección más allá del estímulo o encuentro sexual, es importante acudir a un centro veterinario para que puedan determinar qué está causando este problema y tratarlo lo antes posible. Como se mencionó anteriormente, el priapismo no tratado puede tener consecuencias graves en el pene del perro afectado.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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