¿Qué comen los ajolotes? - Alimentación del ajolote

Aunque puede parecer un renacuajo o larva de enorme tamaño, el ajolote (Ambystoma mexicanum) es una especie curiosa de anfibio caudado, endémico de la cuenca del Valle de México. A pesar de que desde 2006 se encuentra en peligro crítico de extinción, aún es posible encontrar algunos ejemplares en estado salvaje en el lago de Xochimilco.

De naturaleza principalmente acuática, este anfibio sale ocasionalmente al exterior para tomar aire, pero vive principalmente en aguas profundas, donde hay vegetación abundante.

Se diferencia fácilmente por sus peculiares características físicas:

• Cuerpo alargado que puede llegar hasta los 30 centímetros de longitud.
• Un total de seis branquias externas detrás de su cabeza, con las que absorbe oxígeno y expulsa dióxido de carbono.
• Pequeños ojos negros.
• Piel lisa, blanda y elástica.
• Dedos finos, largos y puntiagudos.
• Lengua retráctil.
• Minúsculos dientes dispuestos en hileras.
• Gran capacidad bucal.
• Cola plana que sirve como aleta para nadar.
• Vasos sanguíneos visibles.

En estado silvestre, los colores del ajolote pueden variar entre el color café o pardo, el verde, el gris, e incluso pueden presentar motas de colores más oscuros. En cautividad se han dado variaciones claras y albinas, como el ajolote rosado o dorado.

Por último, en cuanto a la reproducción de este animal, el ajolote, a pesar de conservar sus rasgos juveniles hasta la vejez, entre los 12 y los 18 meses de edad adquiere la capacidad de madurar sexualmente para reproducirse. Una vez al año, ponen entre 100 y 300 huevos adheridos a rocas o a vegetación acuática. Las pequeñas crías nacen entre 10 y 14 días después y se enfrentan a la vida sin la ayuda de sus progenitores.

El ajolote es un anfibio que lleva a cabo una dieta carnívora. Sus dientes le permiten agarrar su alimento, pero no desgarrarlo o masticarlo, por lo que se traga su alimento entero. Al observar su objetivo, el ajolote abre su boca de grandes dimensiones y succiona agua junto con la comida.

Su alimento puede diferenciarse entre alimento vivo y alimento seco:

• Alimento vivo: pequeños crustáceos, gusanos, lombrices, babosas, caracoles, grillos larvas de mosquitos, renacuajos de rana, ocasionalmente peces y otros organismos pequeños de las profundidades del lago de Xochimilco.
• Alimento seco: en cautividad, es habitual ofrecer al ajolote camarones disecados o alimentos de flote, como el que se les da a las tortugas de agua o a los peces. Es importante prescindir de hojuelas o alimentos de peces que no flotan, pues al caer al fondo del acuario o pecera, el animal intenta ingerir el alimento y acaba succionando también piedras o guijarros que estén en el fondo y que pueden causarle graves problemas de salud e incluso la muerte.

De manera complementaria, el ajolote puede alimentarse de pequeños trozos de carne de pollo, de hígado de pollo o pavo y de corazón de vacuno. Aunque estos anfibios pueden resistir un ayuno de varias semanas, en cautiverio se recomienda suministrar alimento entre una o dos veces por semana.

Como apunte anecdótico, el ajolote ha sido descrito como un animal caníbal, por lo que es recomendable separar las larvas al nacer para evitar que acaben siendo alimento de sus progenitores. A su vez, estas pequeñas crías se alimentan básicamente de zooplancton hasta que sus organismos les permiten cambiar a la dieta adulta.

Como ya os adelantamos y habréis podido descubrir, el ajolote es un animal muy curioso y particular. A continuación, exponemos otras curiosidades de esta especie por si aún no os ha sorprendido lo suficiente:

1. Tiene la apariencia de un renacuajo gigante con patas.
2. Es capaz de regenerar algunas partes de su cuerpo cuando son mutiladas, como sus extremidades, cola e incluso células cardiacas o neuronas cerebrales.
3. Es una especie neotenia, o lo que es lo mismo, tiene la capacidad de conservar sus características larvarias incluso cuando alcanza la madurez sexual.
4. A diferencia de la mayoría de anfibios, los ajolotes llegan a la edad adulta sin metamorfosis.
5. Poseen tanto pulmones simples como branquias, y también pueden respirar por la piel.
6. Tiene unos ojos carentes de párpados y sus dedos no poseen uñas.
7. Tiene una esperanza de vida que puede alcanzar hasta los 20 años en cautividad, aunque solo 6 años, como máximo, en estado silvestre.
8. La especie ha sido explotada para estudios medicinales, alimento e incluso ceremonias rituales.
9. Estos animales estaban considerados como la reencarnación del Dios Axólotl durante la época del Imperio Azteca.
10. Sus depredadores naturales son la mojarra tilapia y la garza blanca, aunque su mayor enemigo es el humano.

¿Te has quedado con ganas de más? Entonces no puedes perderte nuestro artículo sobre las curiosidades del ajolote, donde te explicaremos muchos otros detalles sobre esta especie tan singular.

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