¿Cómo preparar hígado de pollo para perros?

Sí, los perros pueden comer hígado y, de hecho, constituye un producto muy beneficioso para ellos. Los órganos en general son alimentos que ofrecen a los perros un alto porcentaje de proteína y son productos mucho más económicos. El único inconveniente es conseguir encontrarlos, ya que en muchas carnicerías es preciso pedirlos con antelación. Así mismo, aconsejamos optar por aquellos que sean ecológicos y frescos, descartando los productos envasados que, en su mayoría, suelen estar cargados de conservantes, aditivos y otras sustancias que es mejor evitar.

Aunque los perros pueden comer hígado de res, cerdo, cordero, pavo o pollo, este último es más aconsejado por su contener un menor porcentaje de colesterol que el resto.

Si conocemos la procedencia del hígado de pollo y sabemos con total certeza que se trata de un producto completamente libre de parásitos, podemos ofrecerlo crudo. Ahora bien, como en general resulta difícil saber si realmente el producto está limpio, lo más recomendable es congelar el hígado de pollo. Cuando sepamos que vamos a preparar la receta tendremos que dejar que se descongele y cocerlo o semicocerlo para acabar de garantizar que el producto es apto para su consumo. De esta forma, ante la pregunta "¿hígado crudo o cocido para perros?" vemos que la respuesta depende, principalmente, de la calidad del producto y que, ante la duda, es mejor cocerlo.

¿Cómo preparar hígado de pollo cocido para perros?

Una forma muy sencilla de cocinar el hígado de pollo para perros es en agua hirviendo una vez descongelado. Si queremos cocinarlo por fuera y dejarlo casi crudo por dentro, con un minuto será más que suficiente. Para cocerlo por completo necesitaremos unos tres minutos.

Cuando esté cocido o semicocido dejaremos que se enfríe por completo, lo trocearemos pequeño para evitar que el animal se atragante y facilitar el proceso de masticación, y lo ofreceremos con un chorrito de aceite de oliva virgen extra, ya que resulta otro alimento muy beneficioso para los perros. Así mismo, podemos condimentarlo con especias como romero, tomillo o cúrcuma, y añadir un diente de ajo picado o medio si al animal le gusta por sus propiedades antiparasitarias. Es importante resaltar que el ajo no podemos ofrecerlo con mucha frecuencia, ya que, tal y como nos indica el Centro de Control de Envenenamiento de Animales Pet Poison Helpline^[2], este alimento presenta un nivel de intoxicación de leve a moderado en función de la dosis y de cada individuo. Para más información, consulta el artículo "¿Los perros pueden comer ajo?".

Cantidad de hígado de pollo para perros

Por cada 10 kg de peso, la nutricionista canina Gemma Knowles nos indica en su libro Cocina sana para tu perro^[3] que la cantidad de carne debe oscilar los 120-150 gramos diarios, a los cuales hay que sumar otros alimentos como verduras o cereales, dependiendo de la dieta que siga el animal. De esta forma, es necesario conocer el peso del perro para establecer la cantidad adecuada de hígado.

Como un hígado de pollo no suele pesar más de 30 gramos, necesitaríamos varios para alcanzar el peso total mencionado. Por ello, una buena opción es mezclar un par o tres de órganos con otros u otras piezas de carne, como corazón, pulmones, pechuga... En cualquier caso, el hígado de pollo no debe darse como un único alimento, más bien debe ofrecerse como un complemento, un añadido a la dieta del perro.

Podemos ofrecer pedazos de hígado de pollo a modo de premio, ya que, como hemos dicho, se trata de un órgano que no pesa más de 30 gramos. Así mismo, podemos mezclarlo con otras carnes como ya hemos recomendado, con arroz cocido y/o verduras, o preparar unas deliciosas galletas.

Recuerda que se trata de un alimento que debe ser un complemento en la dieta, por lo que no es aconsejable proporcionarlo todos los días. Veterinarios especializados en nutrición animal, como Karen Shaw Becker, veterinaria experta en nutrición, o Carlos Alberto Gutiérrez, médico veterinario experto en nutrición canina^[4], informan acerca de las consecuencias de ofrecer a los perros alimentos con un alto porcentaje de fósforo y bajo contenido en calcio y recalcan la importancia de mantener un adecuado equilibrio entre la ingesta de ambos minerales, siendo esta la principal causa por la que no recomienda dar hígado de pollo a los perros todos los días como único alimento. No mantener dicho equilibrio puede hacer que el organismo extraiga el calcio de sus propios huesos, derivando en graves problemas de salud.

Ahora bien, si ya hemos dado a nuestro perro una cantidad de hígado de pollo elevada, no debemos alarmarnos porque son muchos los alimentos ricos en calcio que podemos ofrecer para equilibrar la balanza, como el yogur natural o los huesos.

Contraindicaciones del hígado de pollo

Principalmente, no se recomienda dar hígado de pollo a perros con problemas hepáticos o con altos niveles de colesterol.

El hígado de pollo con arroz está especialmente indicado para perros con problemas estomacales leves o moderados, como gastroenteritis. En casos graves, es preciso acudir al veterinario para encontrar la causa subyacente y tratarla.

Ingredientes

• Arroz integral preferiblemente
• Hígado de pollo
• 1 patata
• 1 zanahoria

La cantidad de los ingredientes dependerá del peso del perro y de si sufre algún problema de estómago o está totalmente sano. Si está sano, podemos sumar otras carnes como pechuga de pollo o pavo y ofrecer una cantidad de arroz inferior a la de carne. Si el animal tiene diarrea, por ejemplo, deberá consumir más fibra, por lo que en este caso es preciso que haya más arroz.

Receta de hígado de pollo con arroz para perros

1. Ponemos agua en una olla y calentamos. La proporción ideal para el arroz integral es tres tazas de agua por cada taza de arroz.
2. Mientras tanto, pelamos la patata y la cortamos en trozos iguales, más bien pequeños. Hacemos lo mismo con la zanahoria.
3. Cuando empiece a hervir, agregamos el arroz, la patata y la zanahoria. Podemos añadir una hoja de laurel si queremos, eso sí, tendremos que retirarla antes de ofrecerle el plato para que no se la coma.
4. Cocinamos hasta que los ingredientes estén listos, durante 15-20 minutos aproximadamente.
5. Unos 5 minutos antes de finalizar la cocción, añadimos el hígado de pollo.
6. Antes de servir es importante trocear la carne si no se ha hecho antes.

Las galletas caseras son perfectas para recompensar a los perros o, simplemente, para darles un capricho con el que disfrutarán muchísimo. Y si además contienen carne tan beneficiosa como el hígado de pollo, ¡mucho mejor!

Ingredientes

• 3 hígados de pollo
• 1 taza de harina integral
• 1 huevo
• 1 cucharada de yogur natural (sin azúcar)
• 1 cucharada de aceite de oliva

Receta de galletas de hígado para perros

• Cocemos los hígados, escurrimos, dejamos enfriar y trituramos.
• Agregamos el huevo, el aceite y el yogur e integramos.
• Sumamos la harina y mezclamos hasta obtener una masa de galletas de hígado para perros.
• Precalentamos el horno a 200 ºC.
• Extendemos la masa de las galletas y las cortamos dándoles la forma que más nos guste.
• Colocamos las galletas de hígado para perros sobre una bandeja forrada con papel de horno y horneamos a 180 ºC durante 10-15 minutos.
• Dejamos que se enfríen y ya podemos dejar que las devoren.

Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Cómo preparar hígado de pollo para perros?, te recomendamos que entres en nuestra sección de Dietas caseras.

¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón: