¿Qué comen los caracoles?

Antes de contarte qué comen los caracoles, necesitas conocer los diferentes tipos de caracoles que existen. Podemos clasificarlos según el tipo de hábitat en el que viven:

Caracoles de tierra

Los caracoles terrestres se caracterizan por utilizar una especie de "moco" o "baba" para desplazarse, que les ayuda a trepar por superficies inclinadas o rugosas. Además, poseen una concha que recubre la mayor parte de su cuerpo, lo que le permite ocultarse de los depredadores.

Además, estos tipos de caracoles cuentan con dos pares de tentáculos retráctiles: uno se encuentra provisto de ojos, mientras que los otros le permiten sentir los objetos que se encuentran a su alrededor. Los caracoles terrestres son hermafroditas, sin embrago, no pueden autofecundarse, por lo que deben copular para reproducirse.

Caracoles de agua dulce

Este tipo de molusco ha logrado colonizar charcos, lagos, lagunas y ríos alrededor del mundo, ya que existen más de 4.000 especies. Al igual que los caracoles terrestres, los caracoles de agua dulce son hermafroditas, no obstante, en este caso la reproducción de los caracoles nos sorprende, pues en este caso sí son capaces de fertilizar sus propios huevos. La esperanza de vida de los caracoles de agua dulce es de un año aproximadamente, pero existen ejemplares que viven hasta cinco años.

Caracoles de mar

Los tipos de caracoles de mar viven en aguas saladas y se caracterizan por la presencia de una concha de gran tamaño enrollada en espiral, la cual presenta una abertura que deja paso al cuerpo blanco del ejemplar. En cuanto a su taxonomía, presentan características similares a los demás tipos de caracoles, sin embargo, pueden tener pequeñas diferencias de tamaño o colores. Un dato curioso de los caracoles marinos es que su concha es utilizada desde tiempos remotos como instrumento musical de viento, similar a una trompeta.

Como has descubierto, existen muchos tipos de caracoles distribuidos alrededor del mundo, por lo que habitan distintos ecosistemas, desde zonas con climas cálidos y desiertos, hasta áreas altas y frías de montaña. Ahora bien, ¿dónde viven los caracoles exactamente?

Las especies de tierra suelen vivir en zonas pobladas por seres humanos, además de vivir en bosques y áreas con mucha vegetación. Es sencillo observarlos en días nublado, ya que no suelen exponerse a los rayos del sol durante mucho tiempo. Prefieren esconderse en la tierra, pero no por eso permanecen inactivos, ya que se desplazan en busca de alimento.

En cuanto a los caracoles de mar, habitan océanos y mares de todo el mundo. Existen especies que viven cerca de las orillas, mientras que otras prefieren las áreas a más de mil metros de profundidad. Los caracoles de agua dulce, por su parte, se encuentran en ríos, lagos y lagunas de todo el mundo, aunque prefieren las zonas más cálidas y húmedas. En estos lugares, es muy común observarlos próximos a las rocas.

Como todo ser vivo, los caracoles necesitan alimentarse para sobrevivir. Las especies marinas presentan una alimentación variada, por lo que existen caracoles que son animales herbívoros, mientras que otros consumen a distintas especies de animales, convirtiéndose así en omnívoros o carnívoros.

¿Qué comen los caracoles de mar? De forma general, se alimentan de plancton, un organismo microscópico presente en el agua. Otras especies ingieren detritos que encuentran en el lecho marino, mientras que otras consumen algas o compuestos de las rocas que se encuentran sumergidas, además de almejas y esponjas marinas.

¿Alguna vez te has preguntado qué comen los caracoles de jardín cuando los observas entre tus plantas? Aquí tenemos la respuesta.

Lo primero que debes saber es que la visión de los caracoles es bastante deficiente, por lo que utilizan el olfato para conseguir su alimento. En general, este debe ser rico en calcio, ya que buscan este componente para fortalecer su caparazón y protegerse de los peligros. Son animales herbívoros en su mayoría, por lo que su dieta consiste en restos vegetales, pedazos de fruta e incluso piedras o tierra.

A pesar de esto, existen algunos tipos de caracoles terrestres que son carnívoros y que, incluso, se alimentan de caracoles más pequeños.

Siguiendo con la alimentación de los caracoles, debes saber qué comen los caracoles de acuario. El objetivo, tanto en los acuarios caseros como en aquellos donde puedes ir a observar la fauna de los ríos, es que la alimentación sea lo más parecida a la que tendrían estos animales en su hábitat natural.

Ahora bien, ¿qué comen los caracoles de agua dulce? En libertad, consumen algas, restos que encuentran en las piedras, flora acuática y plancton. Además, en su acuario casero también puedes ofrecerle comida en escamas para peces.

Ahora que ya sabes de qué se alimentan los distintos tipos de caracoles, necesitas saber cómo lo hacen. A primera vista, pareciera que los caracoles carecen de dientes, pues su cuerpo blando no revela estructuras de este tipo, Sin embargo, ¿cómo comen los caracoles si no tienen dientes? La respuesta es sencilla: poseen un órgano llamado rádula, el cual es similar a una mandíbula. Dentro de la rádula es posible encontrar hileras de pequeñísimos dientes de quitina.

Una vez el caracol ha conseguido su alimento, lo lleva hasta la rádula, donde lo raspa una y otra vez hasta que lo deshace lo suficiente para continuar con el proceso de digestión. Los dientes del caracol sufren mucho daño conforme pasa el tiempo, debido a esto, son sustituidos continuamente por otros.

Imagen: Rádula del caracol de Sara Ortega Espinosa

Esta es una pregunta que se hacen muchas personas. Ya sabes qué comen estos moluscos gasterópodos, pero ¿qué beben los caracoles? En realidad, no beben agua como los seres humanos u otros animales, sino que se desplazan sobre superficies húmedas para absorberla a través de la parte inferior de su cuerpo.

Este mecanismos les permite adquirir los nutrientes necesarios para conservar y fortalecer su concha. Sin embargo, en caso de que el caracol no encuentre superficies húmedas, recurre a la ingesta de alimentos cuya composición contenga la suficiente cantidad del vital líquido.

Si quieres tener un caracol como mascota, debes considerar algunas condiciones para garantizarle una buena calidad de vida. Para cuidar a un caracol, sigue los siguientes consejos:

Escoge una buena casa

Aunque el caparazón les sirve como refugio contra depredadores, debes acondicionar un espacio para que se sienta tranquilo y seguro. Puedes adquirir una pecera de plástico o vidrio que cuente con ventilación, luz natural y suficiente humedad.

Cubre la superficie de la pecera con sustrato, puede ser tierra, marga, mantillo y musgo. Asegúrate de que no contenga pesticidas, ya que pueden ser perjudiciales para los caracoles. Además, es importante señalar que los caracoles comen cartón, por lo que debes descartar este material en el momento de darle una casa.

Decora el nido

Los caracoles son animales muy curiosos, es recomendable que adornes su hogar con ramitas para escalar, plantas, rocas y objetos interesantes con los que pueda interactuar. Jamás debes colocar vidrio, cerámicas un objetos cortantes.

Alimentación

Debes asegurarte de que tu caracol siempre se encuentre bien alimentado. Coloca la comida en el extremo contrario de la pecera, alejada del nido, para que el caracol debe trasladarse a la hora de comer, esto ayudará a preservar su hogar, hará más fácil la limpieza y le permitirá ejercitarse.

No olvides que requieren una alimentación rica en calcio, por lo que necesitas añadir cascaras de huevos bien trituradas para su consumo. El resto de la dieta dependerá del tipo de caracol y la especie.

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