Áscaris en perros - Síntomas y tratamiento

Los ascáridos son gusanos redondos (es decir, nematodos) capaces de parasitar multitud de especies animales. En el caso de los carnívoros, como el perro, las especies de ascáridos que pueden causar una parasitosis son:

• Toxocara canis
• Toxascaris leonina

A continuación, hablamos más en profundidad sobre las características de cada uno de estos parásitos.

Toxocara canis

Es un nematodo intestinal grande, cuyos adultos llegan a medir entre 10 y 15 centímetros. Puede infectar a perros de cualquier edad, aunque en los cachorros suele producir una enfermedad más grave.

Los gusanos adultos se localizan en el intestino delgado, donde depositan huevos que, posteriormente, son eliminados con las heces. Una vez en el ambiente, los huevos se convierten en una fuente de infección para otros perros. Así, tras la ingestión de los huevos, se produce la eclosión de los mismos en el intestino delgado, lo cual ocasiona la liberación de las larvas que hay en su interior. Una vez liberadas las larvas de Toxocara, estas pueden realizar cuatro tipos de migraciones en el organismo del perro:

• Migración entero-neumo-entérica: las larvas penetran a través de la pared intestinal, migran hasta los pulmones y finalmente vuelven de nuevo al intestino, donde se cierra el ciclo al convertirse en adultos. Esta migración se produce en perros que se infectan con menos de 5 semanas de edad.
• Migración entero-neumo-somática: la migración comienza igual que la anterior, desde el intestino hasta los pulmones, pero a partir de ahí las larvas migran por todo el organismo, quedando acantonadas en distintos tejidos (como la musculatura, el hígado, el riñón, el útero y las glándulas mamarias). Esta migración se produce en perros que se infectan con más de 5 semanas de edad.
• Migración hepato-neumo-entérica: es la migración que se produce en los cachorros cuando se infectan vía transplacentaria, es decir, en el útero de la madre. Las larvas acantonadas en los tejidos de la madre pasan a los cachorros a través de la circulación materno-fetal. Una vez en el feto, migran hasta el hígado, de ahí a los pulmones y finalmente al intestino.
• Ciclo entero-entérico: realmente no es una migración en sí misma, puesto que los parásitos únicamente están presentes en el intestino. Este tipo de migración se produce cuando los perros se infectan por ingestión de hospedadores paraténicos (como roedores, aves o invertebrados) o por vía lactogénica (en cachorros que consumen leche de madres infectadas).

Toxascaris leonina

También es un nematodo intestinal, aunque los adultos son ligeramente más pequeños que los de Toxocara (suelen medir entre 3 y10 centímetros).

En este caso no se producen migraciones orgánicas del parásito, sino que el ciclo tiene lugar exclusivamente en el intestino (ciclo entero-entérico).

En efecto, las larvas de Toxocara canis pueden infectar a las personas y ocasionar una enfermedad conocida como larva migrans visceral. Esta enfermedad se caracteriza por la aparición de lesiones granulomatosas en distintos órganos (fundamentalmente en hígado, pulmón, cerebro y ocasionalmente en el ojo), y se asocia a la aparición de fiebre intermitente, tos persistente, pérdida de peso y de apetito.

Afecta sobre todo a niños menores de 5 años, los cuales suelen infectarse al comer tierra de areneros contaminados con huevos de estos parásitos. No obstante, se trata de un problema de salud pública global, puesto que la infección puede producirse en personas de cualquier edad.

La prevención de esta enfermedad humana se basa en unas sencillas medidas:

• Mantener a los perros alejados de parques y zonas de recreo de los niños.
• Realizar un correcto protocolo de desparasitación en los perros, desde su nacimiento.
• Evitar el contacto estrecho con perros que no hayan sido sometidos a un correcto control parasitológico.

Ahora que conocemos cuáles son las especies de parásitos áscaris que pueden afectar a los perros, es preciso que expliquemos cuáles son las vías por las que los perros pueden adquirir esta infección.

Los perros pueden infectarse por Toxocara canis por 4 vías distintas:

• Ingestión de huevos embrionados presentes en el ambiente.
• Ingestión de hospedadores paraténicos (roedores, aves o invertebrados) que tienen larvas acantonadas en sus tejidos.
• Vía transplacentaria: en el útero materno. En este caso, los cachorros nacen infectados.
• Vía lactogénica: a través de la leche, en cachorros lactantes.

En el caso de Toxascaris leonina, la infección únicamente se puede producir por dos vías:

• Ingestión de huevos embrionados presentes en el ambiente.
• Ingestión de hospedadores paraténicos.

Es decir, en el caso de Toxascaris no se puede producir la transmisión de la madre a sus cachorros de manera vertical.

Ya sabemos cómo se transmite la ascaridiasis en perros pero, ¿qué síntomas puede producir? Pues bien, los síntomas de ascaridiasis en perros pueden variar en función de si el parásito realiza o no migración por el organismo.

En general, los perros con ascáridos suelen mostrar un retraso en el crecimiento, mal aspecto y vientre abultado. Tanto en Toxocara como en Toxascaris, lo más habitual es observar vómitos y diarreas, como consecuencia de la presencia del parásito en el estómago y el intestino. Periódicamente se eliminan parásitos adultos con las heces y más raramente por el vómito.

En el caso concreto de Toxocara canis, en la fase de migración pulmonar es habitual que se produzcan neumonías, acompañadas de tos, descarga nasal e incremento de la frecuencia respiratoria.

La muerte puede producirse tanto en la fase pulmonar como en la fase entérica (por rotura intestinal y consiguiente peritonitis). En general, las infecciones suelen ser más graves cuando los animales se crían en instalaciones con escasa higiene y también en aquellos individuos con un estado inmunológico o nutricional comprometido.

El diagnóstico presuntivo de la ascaridiasis en perros suele hacerse en base a la sintomatología, aunque para su confirmación es necesario realizar un análisis coprológico.

La realización de un análisis de heces permitirá detectar la presencia de huevos de ascáridos e identificar la especie concreta que ocasiona la infección. Los huevos de Toxocara son esféricos, oscuros y tienen una cubierta gruesa que suele presentar pequeñas hendiduras. Sin embargo, los huevos de Toxascaris son ligeramente ovoides, tienen una coloración más clara y presentan una cubierta lisa con una especie de trenzado en su cara interna.

Para terminar, vamos a hablar sobre cómo tratar los ascáridos en perros. El protocolo de desparasitación frente a los ascáridos va a depender de la edad y del estado fisiológico de los animales. En este sentido:

• Los cachorros deben desparasitarse cada quince días, a partir de las dos semanas de edad. Este tratamiento quincenal debe repetirse hasta las 2 semanas postdestete. Tras ello, se debe desparasitar mensualmente hasta los 6 meses de edad.
• Las perras gestantes deben tratarse con lactonas macrocíclicas en los días 40 y 55 de gestación, o con fenbendazol desde el día 40 de gestación hasta el segundo día postparto.
• Las perras lactantes deben tratarse cada dos semanas, de forma simultánea a sus cachorros.
• Por último, en los perros adultos lo más recomendable es evaluar de forma individual el riesgo de cada animal, para así establecer la pauta de desparasitación más adecuada. La recomendación general es realizar tratamientos al menos 4 veces al año, aunque en situaciones de riesgo (como perros que conviven con niños) es recomendable realizar una desparasitación mensual. Como alternativa a la desparasitación rutinaria, se pueden realizar análisis coprológicos periódicos, a intervalos adecuados, y tratar únicamente en caso de que el análisis sea positivo.

Ahora que conoces los tipos de áscaris en perros y cómo actúan, acude al centro veterinario ante el primer síntoma.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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