¿Cómo duermen las tortugas?

Sí, las tortugas duermen como todos los animales ya que necesitan del sueño para descansar y recuperarse. Aunque las tortugas de agua, como la marinas, por ejemplo, pasan la mayor parte del tiempo sumergidas, igual requieren de patrones de vigilia y sueño.

De esta manera, las tortugas de agua, es común que duerman sumergidas, refugiadas en rocas o corales, e incluso en el fondo acuático. Cuando una tortuga acuática está activa, requiere cada ciertos minutos subir a la superficie para poder tomar aire y respirar por medio de sus pulmones, pero cuando descansa, su metabolismo se disminuye, y por tanto la demanda de oxígeno es menor, por lo que puede pasar horas bajo el agua mientras esté tranquila.

Además, hay especies de tortugas de agua que pueden hacer un intercambio gaseoso a través del tejido de la cloaca, lo que le ayuda a mantenerse bajo el agua por un buen tiempo, ya que así el oxígeno llega a la sangre y es llevado a todos los órganos.

Ahora que ya sabes que las tortugas duermen, por mucho que sean de agua, puedes consultar las "Especies de tortugas de agua dulce" en el siguiente post de ExpertoAnimal. Así podrás conocer más sobre los tipos de tortugas que existen.

Al igual que las de agua, las tortugas de tierra duermen también, para lo cual, si están en su hábitat natural, buscarán un lugar específico para hacerlo. Es común que las tortugas cierren los ojos mientras duermen, y las especies que pueden retraerse en su caparazón es normal que lo hagan mientras duermen. Ahora, las tortugas de tierra siempre duermen boca abajo, tal como cuando se desplazan, ya que darse la vuelta no es algo que puedan hacer fácilmente a voluntad como otros animales.

Aquí tienes las "Especies de tortugas de tierra" para que puedas saber más sobre estos animales.

Las tortugas de agua pueden buscar sitios profundos para dormir y refugiarse entre rocas o corales, ya que se sabe que la profundidad del agua les brinda ciertas ventajas para protegerse de algunos depredadores, y particularmente de las acciones humanas. Pero claro, esto no es una regla absoluta porque las tortugas también pueden dormir en aguas poco profundas de hasta unos dos metros, por ejemplo. En este sentido, el gasto que implica sumergirse es preferible antes de quedar expuestas a ciertos ataques de depredadores.

Una tortuga de agua también puede dormir en la superficie o descansar sobre algún afloramiento rocoso, de modo que esto es posible que ocurra, sobre todo si se encuentra en un lugar donde se sienta segura. Esto particularmente pasa en las tortugas de agua dulce.

En cuanto a las tortugas terrestres, estas buscaran un lugar apropiado en cuanto a la temperatura y refugio de peligros, así que escondidas dentro de la vegetación o algún lugar que las cubra es ideal.

En el caso de las tortugas que se tienen en cautiverio, ya estarán sujetas a las condiciones en que se les tengan. Como ves, las tortugas duermen dentro o fuera del agua y, aunque consideramos que las tortugas no son animales domésticos, en caso de tener una, hay que asegurarse de brindarle un medio adecuado porque, por ejemplo, su temperatura corporal depende de la ambiental, de modo que es un factor a cuidar para que pueda descansar apropiadamente.

En general, las tortugas tienen hábitos de actividad diurna y suelen dormir por las noches, aunque estas costumbres varían, por ejemplo, en la época reproductiva y de desove, porque las tortugas marinas suelen salir a las playas en la noche para poner sus huevos. Te hablamos de "¿Cómo nacen las tortugas?" a continuación.

Las tortugas de agua pueden dormir aproximadamente entre unas 4 a 7 horas bajo el agua, y las de tierra también duermen varias horas seguidas. No obstante, si hacen mucha actividad en el día, pueden tomar periodos de descanso diurno.

Ahora, hay ciertas especies de tortugas como la tortuga de orejas rojas (Trachemys scripta) y la tortuga Fitzroy (Rheodytes leukops), entre otras, entran en un estado de brumación, el cual ocurre cuando la temperatura del agua empieza a descender. De este modo, estos animales disminuyen su actividad metabólica y pueden pasar semanas bajo el agua hasta que la temperatura empiece a subir nuevamente. Otro ejemplo lo tenemos en la tortuga pintada (Chrysemys picta), quien puede pasar hasta más de cuatro meses en brumación.

Estos casos mencionados responden a una adaptación de estos animales para sobrellevar las condiciones ambientales, y no son propiamente las rutinas diarias de sueño que tienen, ya que, en los meses en que la temperatura se mantiene algo cálida, estas especies tienen ciclos de sueño y vigilia que alternan diariamente.

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