Esperanza de vida de un perro con insuficiencia renal

La recuperación en perros con insuficiencia renal está condicionada por la evolución de la misma. Si la enfermedad es leve o se detecta de forma temprana, el animal puede recuperarse sin secuelas a base de tratamiento médico específico y sintomático. Sin embargo, si el cuadro es severo y su detección es tardía, el animal puede recuperarse parcialmente, es decir, tendrá secuelas en su riñón de forma permanente. Esta es la evolución más habitual, perros que comienzan con un cuadro agudo y tras varios días de tratamiento se estabilizan con unos marcadores renales por encima de lo normal. Por último, si el animal ya tenía patologías previas y el cuadro es muy grave, es probable que no consiga recuperarse o que fallezca a los pocos días.

Por ello, es importante recalcar que si se observan síntomas relacionados con la insuficiencia renal, se recomienda visitar a tu veterinario de confianza lo antes posible.

La esperanza de vida en perros con insuficiencia renal está sujeta a una serie de parámetros que pueden darnos una aproximación sobre el pronóstico del animal. De forma general, en perros que se diagnostican de enfermedad renal crónica, desde el momento del diagnóstico se estima un 65 % de supervivencia. Dentro de este porcentaje, el tiempo medio de supervivencia oscila los 226 días. No obstante, varía mucho dependiendo de si es un caso de insuficiencia renal en perros ancianos o en un animal sano sin patologías previas.

Otro factor a tener en cuenta es la clasificación IRIS (International Renal Interest Society) de los pacientes renales crónicos, ya que los IRIS IV (los más graves) tienen hasta 5 veces más probabilidades de fallecer que los IRIS I. Algunos factores que mejoran el pronóstico son el uso de dieta renal, una buena condición corporal, tratamiento pautado para la proteinuria y para la hipertensión arterial. La clasificación IRIS es la siguiente:

• IRIS I: valores de creatinina y SDMA por debajo de lo patológico (1.4 y 18 respectivamente), puede haber problemas de incontinencia no relacionados con el riñón, hallazgos casuales en ecografía o biopsias renales con lesiones. Se puede diagnosticar enfermedad renal crónica de forma temprana.
• IRIS II: creatinina y SDMA entre 1.4-2.8 y 18-35, respectivamente. Los signos clínicos suelen ser ligeros o ausentes.
• IRIS III: 2.8-5 de creatinina y 36-54 SDMA. Hay presencia de signos clínicos relacionados con la azotemia, pero pueden ser muy variables.
• IRIS IV: creatinina por encima de 5 y SDMA por encima de 54. Signos clínicos sistémicos muy acentuados y probablemente comience con crisis urémicas.

Como hemos comentado, la esperanza de vida de un perro con insuficiencia renal IV será mucho más corta. Sin embargo, insistimos, no es posible indicar un tiempo exacto de vida. En casos de insuficiencia renal en perros ancianos, lo recomendable es establecer un calendario de revisiones con el veterinario habitual con el fin de controlar la evolución de la enfermedad.

Al tratarse de una enfermedad progresiva e irreversible, el tratamiento va a dirigirse a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de nuestra mascota. No obstante, en función del estado del animal, pueden plantearse diferentes pautas para mejorarla y, en la medida de lo posible y dependiendo de cada caso particular, aumentar la esperanza de vida:

• Pienso renal específico: este pienso contiene aminoácidos esenciales, agentes antioxidantes y concentraciones bajas de sales para facilitar el buen funcionamiento del riñón.
• Quelantes de fósforo: con el objetivo de reducir la concentración de fosfato en sangre.
• Bicarbonato sódico: en caso de acidosis metabólica.
• Fluidoterapia: para corregir el desequilibrio electrolítico.
• Antieméticos, protectores de estómago y antiácidos: para reducir la sintomatología digestiva.
• Vasodilatadores: con el objetivo de mejorar la función renal y reducir la hipertensión arterial.

En cuanto a qué pueden hacer los cuidadores, en la fase terminal de la insuficiencia renal, sobre todo en pacientes ancianos, el animal deja de comer. En este caso, se recomienda que coma lo que desee, ya que si se dan varios días de ayuno combinados con la patología puede ser determinante para la vida de nuestra mascota. Además, es importante mantenerlo hidratado colocando varios bebederos a lo largo de la casa.

Por último, si el can lleva varios días con malestar, lo mejor es asistir a un veterinario para pautar un tratamiento sintomático o incluso administrar fluidos por vía intravenosa.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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