Reproducción del pez cebra
El pez cebra, de nombre científico Brachydanio rerio, es una especie originaria de las aguas dulces de la India y Pakistán. Se ha convertido en un pez muy popular debido a que requiere cuidados muy sencillos, por lo que es ideal para cuidadores novatos.
En lo que se refiere a la reproducción del pez cebra, existen algunas particularidades que deben tenerse en consideración, no solo para que nazcan los alevines, sino también para que crezcan fuertes y sanos. Sigue leyendo este artículo de ExpertoAnimal para que descubras todo sobre esta especie.
Antes de la reproducción
Los peces cebra son animales sociables, por lo que tener grupos de adultos de entre 6 y 10 peces es lo ideal. Cuando no pertenecen a un cardumen, estos peces se vuelven violentos, irritables y nerviosos, lo cual es negativo no solo para su salud en general, sino también para su reproducción. Recomendamos una pecera grande para que puedan nadar a sus anchas.
Asegúrate de que en tu cardumen haya tanto peces macho como hembras. Los machos suelen ser más delgados, de cuerpo dorado cruzado de líneas azuladas, mientras que las hembras poseen un vientre más abultado con líneas azules y cuerpo blanco.
Su esperanza de vida, en condiciones óptimas, es de 4 años como máximo. Alcanzan la madurez sexual a partir de los 8 meses, pero algunos especímenes pueden tardar hasta 16 antes poder aparearse. Se reproducen en cualquier momento del año, así que dependerá de ti ofrecerles el escenario ideal para esto.
Cuando hayas decidido que es el momento de criar, alimenta a los peces del cardumen con comida vida un par de semanas antes del apareamiento. Agrega en el tanque o pecera larvas de mosquitos, insectos, dafnias y artemia. Este tipo de comida no solo contribuirá a la salud de las crías, sino que además estimula el proceso de apareamiento.
El apareamiento del pez cebra
Pasadas las dos semanas de comida viva, escoge la hembra que tenga el abdomen más abultado, indicador de que carga gran cantidad de huevos, y dos machos que luzcan activos. Si deseas más crías también puedes aparear mayor número de peces, siempre contando dos machos por cada hembra.
Es necesario acondicionar una pecera aparte solo para el apareamiento y la cría, debido a que los peces adultos devoran los huevos y a sus propios hijos. Traslada a los posibles padres a esta pecera durante la noche y espera de 24 a 48 horas para que se produzca el desove.
Observarás que al amanecer los machos comenzarán a corretear a la hembra, que tratará de huir de ellos. Esto es completamente normal en el ritual de apareamiento. Cuando la hembra de haya cansado, aceptará al macho y expulsará los huevos, que caerán al fondo de la pecera, donde serán fertilizados por el macho. Serán entre 200 y 400 huevecillos. Finalizado este proceso, devuelve a todos los adultos a la pecera grande con el resto del cardumen.
¿Cómo debe ser la pecera de cría?
Antes del apareamiento y desove, la pecera para la reproducción y cría, más pequeña que la del cardumen, debe ser acondicionada de una manera específica.
Consigue una pecera o acuario de aproximadamente 20 litros. La temperatura del agua debe ser de 27 grados centígrados. Los huevos de los peces cebra no se adhieren solos, por lo que deberás buscar una forma para que puedan estar resguardados y seguros. Te ofrecemos 3 opciones para esto:
- Coloca canicas en el fondo de la pecera para proteger los huevecillos.
- Instala una red de malla de finos agujeros a unos cinco centímetros del fondo del acuario.
- Cubre el piso de tu pecera con grava gruesa.
Cualquiera de estos métodos servirá para construir un espacio en el cual los huevos puedan permanecer estáticos y estar lejos de los progenitores en el momento exacto del desove. Aparte de esto, añade un filtro de esponja con aireado, un termostato para verificar la temperatura del agua y algunas plantas flotantes. Esto creará un ambiente adecuado para los pequeños que están por nacer.
Además, deberás cubrir tres de las caras del acuario para controlar la entrada del sol, que solo debe darles de forma directa por la mañana, a través de la cara que esté descubierta.
Durante el apareamiento, el agua del tanque debe ser muy poca, lo suficiente para cubrir el método que has implementado para resguardar los huevos, más algo adicional para que los padres naden. La idea es que los huevos caigan cuanto antes en un lugar seguro, pues la hembra los devora a medida que los expulsa.
Al final del desove y cuando hayas retirado a los padres del tanque de cría, agrega más agua y unas gotas de azul de metileno para evitar la aparición de hongos.
Eclosión y juventud
Los huevecillos eclosionan al tercer día del desove. Notarás pequeñas manchitas transparentes adheridas a los cristales de la pecera. Durante esta etapa no es necesario proporcionarles comida, pues se alimentan del propio saco vitelino.
Entre el día 5 o 6 comenzarán a aventurarse por la pecera en viajes cortos y deberás alimentarlos con comida para alevines en polvo y yema de huevo cocido en diminutas dimensiones, que les ofrecerás en pequeñas cantidades para no ensuciar el tanque innecesariamente. En esta etapa el acuario continúa estando cubierto.
A medida que los alevines crecen, se aumenta el nivel del agua y se les ofrece mayores horas de luz. Para los imprescindibles cambios de agua, utiliza solamente el tubo de tu filtro de esponja, pues de lo contrario no podrás cambiarla sin afectar a los alevines. En aras de optimizar la limpieza, también es factible que añadas al tanque algunos caracoles vivos, que se encargarán de ingerir los residuos.
Pronto, a partir del día 10 o 12, podrás alimentarlos con papillas preparadas en casa y larvas de artemia. La mortalidad es muy alta, pero a los tres meses habrán alcanzado la adultez. Puedes colocarlos en el tanque del cardumen, si el tamaño del mismo te permite tantos especímenes juntos. De lo contrario, lo recomendable es adquirir otro.
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