¿Cómo nacen los conejos?

Los conejos son animales muy precoces en lo que a reproducción se refiere, pues pueden tener descendencia a edades muy tempranas. En concreto, un conejo es fértil a partir de los 4-5 meses de edad, algo más en las hembras, siendo en ellas lo habitual a lo 5-6 meses.

Esta media es general, pues de unas razas a otras la edad de maduración sexual varía sensiblemente. Sin embargo, aunque con esa edad ya son capaces de reproducirse, se recomienda esperar a los 8-9 meses si se quieren realizar cruces, pues en ese momento el organismo de los conejos ya está completamente desarrollado, pudiendo evitarse complicaciones en la gestación y el parto.

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En cada embarazo, una misma coneja puede tener camadas muy dispares, pues estas pueden estar compuestas por entre 1 y 5 gazapos. Sin embargo se han registrado camadas increíblemente numerosas, de hasta 15 gazapos.

También, cabe destacar que en algunas razas, sobre todo en las medianas, es frecuente que la media sea superior, con entre 5 y 8 gazapos por parto. Lo que suele pasar es que, cuanto mayor es la camada, mayor índice de mortalidad se da entre las crías, pereciendo muchas de ellas prácticamente al nacer.

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Tras una gestación de 30-32 días, llega el momento del parto y el alumbramiento. En este momento, la madre irá al nido que tenga, la madriguera o un lugar apartado, para tener a sus crías protegidas.

La coneja prepara un nido con los materiales que tenga disponible, usando en muchos casos su propio pelo como manto. Cuando comienza el parto, la coneja se retira al nido, donde permanece durante el alumbramiento y comienza a amamantar a sus crías prácticamente en cuanto salen al mundo exterior.

¿Cuánto dura el parto de una coneja?

El parto de una coneja es extraordinariamente rápido, pues se estima que la media que tardan en parir es de apenas media hora. Este parto suele darse sin complicaciones, en las horas de la noche o el amanecer, cuando el animal puede estar más tranquilo y la oscuridad lo ampara frente a peligros y depredadores.

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Si por el motivo que fuera, necesitáramos separar a las crías de su madre, esta separación ha de hacerse únicamente cuando sea oportuno. Para que puedan separarse los gazapos de su madre sin que esto acarree un grave problema para los pequeños, la separación tiene que hacerse cuando los gazapos han sido destetados. Así, ya no necesitan el aporte de la leche materna, algo fundamental para el correcto desarrollo de su organismo.

En general, se puede tener como referencia la edad de 28 días desde el nacimiento, o a partir de los 25 días si es muy urgente. También es frecuente que en camadas muy grandes, el destete deba hacerse más tarde ,pues el aporte de leche materna es inferior por gazapo, pudiendo el desarrollo ser más tardío de lo habitual.

Cuando mamá y papá conejo deciden tener conejitos, la mamá tendrá que llevarlos en su barriga hasta que los conejitos están listos para salir. Cuando nacen, son muy pequeños y delicados, por eso, no se pueden coger ni se puede jugar con ellos hasta que hayan crecido, o podremos hacerles daño sin querer.

Mamá coneja tiene entre 1 y 5 conejitos, a los que cuida mucho y les da de mamar leche que ella misma genera. Esta leche es muy importante para sus bebés, por eso no se pueden separar de su mamá hasta que no dejen de tomarla.

Si tu coneja ha tenido conejitos, tienes que ayudarla, dándole de comer, también de beber agua limpia, mimándola y protegiéndola, dejándola en un sitio tranquilo y calentito. ¡Así, cuando los conejitos crezcan, podréis jugar todos juntos!

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