Distensión abdominal en perros – Síntomas, causas y tratamiento

La distensión abdominal es un proceso mediante el cual el abdomen aumenta de tamaño y cambia su forma, volviéndose más redondeado y prominente. Este incremento de la cavidad abdominal puede ser por el acúmulo de líquidos, gases u órganos que aumentan de tamaño de forma anormal. Como se observa, los perros con distensión abdominal pueden estar sufriendo una gran variedad de enfermedades que pueden afectar a su salud, por lo que es importante acudir a un veterinario lo antes posible para detectar la causa principal e intentar solucionar la patología.

No obstante, debe diferenciarse de la obesidad, ya que el proceso de ganancia de peso es más progresivo en el tiempo y a la palpación se puede detectar un exceso de grasa por delante de la pared abdominal. En el caso de la dilatación abdominal, el abdomen se contrae al ser presionado y la palpación es variable en función de cuál sea el agente causal, pudiendo presentar un tacto muy duro o lleno de gas. Por lo tanto, es importante conocer la diferencia para saber si un perro tiene distensión abdominal.

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Las causas son muy variables, por lo que se van a intentar encuadrar atendiendo a cuál puede ser el origen de la distensión abdominal:

• Aumento del tamaño de los órganos: en esta causa detectaremos una palpación irregular y dura del abdomen, por lo que se necesitan más pruebas para conocer qué órganos están afectados específicamente. Este aumento de tamaño de los órganos puede relacionarse con procesos infiltrativos, torsión y congestión de los órganos afectados. En este otro artículo hablamos en profundidad sobre la "Torsión gástrica en perros".
• Tumores: la aparición de tumores también puede producir este efecto en el abdomen, así como granulomas o acumúlos de tejido graso.
• Acúmulo de fluidos: en este caso, la palpación es similar a presionar una bolsa de agua, de manera que el contenido se mueve de forma uniforme y apenas muestra resistencia. Esta acumulación de líquidos puede relacionarse con efusiones (aumento de líquido de diferentes naturalezas como trasudados o exudados, que a veces se relaciona con problemas cardiacos y otras con inflamaciones abdominales), rotura de la vejiga, abscesos, piometra, obstrucciones urinarias y obstrucciones digestivas.
• Contenido gastrointestinal: en este caso, la palpación se notará más heterogénea debido a la diferente naturaleza del contenido digestivo. Este acúmulo de contenido digestivo puede deberse a constipaciones, megacolon, íleo paralítico, atracón de comida o parasitaciones intestinales abundantes.
• Gas: si la palpación recuerda a estar apretando un globo o se auscultan borborigmos, puede que el abdomen esté lleno de gas. Las causas principales son la dilatación-torsión gástrica, torsión intestinal, ruptura del tracto gastrointestinal, postquirúrgica, infecciones bacterianas enfisematosas o trauma penetrante.
• Atonía abdominal: en este caso, la musculatura abdominal pierde su contractibilidad y el abdomen se encuentra totalmente relajado. Algunas enfermedades hormonales como el hipoadrenocorticismo pueden estar involucradas.
• Gestación: por último, y aunque pueda parecer evidente, debe descartarse en caso de perras enteras la gestación.

El diagnóstico es una fase crítica porque en muchas ocasiones este signo se relaciona con una urgencia. Por esta razón, hay que acudir cuanto antes al veterinario, ya que la supervivencia puede residir en pocas horas de diferencia. Algunas de la pruebas claves para el diagnóstico de la causa que se encuentra tras la distensión abdominal del perro son las siguientes:

• Exploración del paciente: es importante explorar primero de forma general para conocer el estado del paciente, ya que muchos animales con distensión abdominal llegan con signos de shock y deben recibir tratamiento sintomático cuanto antes.
• Examinación profunda e historial clínico: la información que se pueda conocer del can es esencial para descartar patologías asociadas al aparato reproductor, digestivo u otras enfermedades de forma rápida.
• Análisis de sangre y suero sanguíneo: esta prueba puede acercarnos mejor al estado actual del paciente y la gravedad de la situación, así como los órganos que funcionalmente están más comprometidos.
• Urianálisis: en comparación con el resto de las pruebas nos puede ayudar a conocer el origen de la enfermedad o a descartar patologías urinarias.
• Diagnóstico por imagen: la radiografía y la ecografía, tanto abdominal como torácica, también pueden ayudar a descartar patologías de otros órganos como el corazón, el hígado, el bazo o la vejiga, entre otros.
• Punción abdominal: en caso de no haber encontrado el origen con las pruebas anteriores, la punción abdominal puede definir qué tipo de líquido está ocupando el abdomen y cuál puede ser su origen.
• Laparotomía: si la situación es límite y se sospecha de una rotura de algún órgano, una laparotomía exploratoria puede ayudar a localizar el problema y a comenzar a solucionarlo.
• Biopsia: en casos muy específicos se necesita un examen en profundidad de tejido para descartar patologías como el cáncer.

¿Qué hacer si tu perro tiene distensión abdominal? Acudir rápidamente al centro veterinario porque varias de las causas que pueden estar detrás de este síntoma son muy graves. Así, el tratamiento se debe ajustar a la patología específica del paciente.

En casos de enfermedad endocrina o cardiaca, el tratamiento médico de la causa junto a una reducción de la distensión abdominal puede ser suficiente. En otras situaciones, la cirugía es la única vía para solucionar el problema. Muchas de estas operaciones están consideradas de alto riesgo, por lo que es algo que los cuidadores deben tener en cuenta a la hora de conocer el alcance de la enfermedad. Por otro lado, es importante comprobar una buena vascularización de los órganos adyacentes, ya que en algunas circunstancias pueden haber estado horas sin recibir flujo sanguíneo y si se dejan en el abdomen, el resultado puede ser catastrófico.

Los tratamientos caseros no son una opción y todo aquello que sea retrasar la asistencia veterinaria puede suponer la pérdida de la vida del animal. Por lo tanto, lo más recomendable es ponerse en manos de un profesional sanitario lo antes posible. Causas como la torsión gástrica únicamente se pueden solucionar mediante cirugía, es por ello que insistimos en la importancia de la asistencia veterinaria urgente.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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