¿Los gatos pueden comer tomate?

La tomatera es una planta de la familia de las solanáceas. Como el resto de especies de esta familia, es una planta venenosa. Los tallos y las hojas contienen compuestos tóxicos como la solanina, la tomatina y algunas glicoproteínas. En los gatos, estos compuestos ocasionan un cuadro de intoxicación caracterizado por la aparición de hipersalivación, inapetencia, malestar gastrointestinal, debilidad, midriasis (dilatación de pupilas) y bradicardia (disminución de la frecuencia cardiaca).

Los frutos inmaduros de la tomatera, es decir, los tomates verdes, también contienen estos compuestos tóxicos. Sin embargo, a medida que van madurando, los van perdiendo, de manera que cuando los frutos están maduros poseen una cantidad insignificante de estos tóxicos.

Teniendo en cuenta lo anterior y tomando en consideración la gran cantidad de beneficios nutricionales que pueden aportar los tomates, debemos concluir que, efectivamente, los tomates se encuentran en la lista de alimentos aptos para los gatos, siempre y cuando estén maduros. De hecho, se trata de una hortaliza que se suele usar con frecuencia como ingrediente en los piensos para gatos. Por tanto, los tomates verdes son tóxicos, pero los rojos sí son buenos para los gatos.

¿Los gatos pueden comer tomate frito?

No, los gatos no deben comer tomate frito porque este es un método de cocción no recomendado para ellos debido a la cantidad de calorías que aporta. En el apartado destinado a explicar cómo dar tomate a un gato hablaremos de las mejores formas de introducir este fruto en su dieta.

El tomate es una hortaliza que puede aportar diversos beneficios nutricionales cuando se introduce en la dieta de los gatos de forma correcta. A continuación, señalamos los más relevantes:

• Es un alimento poco calórico, pues tan solo aporta 22 kcal por cada 100 gramos de producto. Esto permite incluir el tomate en la dieta de los gatos sin que suponga un incremento significativo del valor energético de su ración, lo cual puede ser especialmente recomendable en los gatos con tendencia al sobrepeso.
• Tiene una elevada proporción de agua. De hecho, el agua es el componente más abundante del tomate (93 %). Su consumo ayuda a mantener el organismo hidratado, lo cual es especialmente beneficioso en los gatos, pues son animales que tienen tendencia a beber poca agua. Si es tu caso, en este artículo te explicamos Cómo hacer que tu gato beba agua.
• Es una fuente de vitaminas y minerales. Entre las vitaminas, destaca su contenido en vitamina A (fundamentalmente en forma de carotenoides provitamina A) y la vitamina C. Entre los minerales, destacan el hierro y el selenio.
• Tiene un gran poder antioxidante. Las vitaminas A, C y el selenio contribuyen a este efecto, pero lo que verdaderamente marca la diferencia en cuanto a su poder antioxidante es la presencia de licopeno, un caroteno o pigmento vegetal que, además de ser responsable del color rojo del tomate, también tiene un gran poder antioxidante, protegiendo las células del estrés oxidativo.

Ahora que sabes que el tomate rojo es bueno para los gatos, si después de leer los beneficios que puede aportar este alimento decides incluirlo en la dieta de tu gato, debes sabes que puedes hacerlo de dos maneras:

• En caso de que tu gato habitualmente consuma una ración comercial (ya sea pienso seco o comida húmeda), podrás introducir el tomate a modo de premio, siempre que a tu gato le agrade su sabor y su textura.
• En caso de que tu gato se alimente con una dieta casera, podrás incluir el tomate como un ingrediente más dentro de su ración. Por ejemplo, si te preguntas si los gatos pueden comer sardina con tomate, la respuesta es sí siempre que sea un plato totalmente casero, sin sal ni especias añadidas. En este otro post hablamos de los Pescados que pueden comer los gatos.

Independientemente de si utilizas el tomate a modo de premio o en la ración habitual de tu gato, debes tener en cuenta una serie de consideraciones antes de aportarlo:

1. Se deben seleccionar tomates que estén bien maduros (es decir, colorados), pues ya hemos mencionado que los tomates verdes son tóxicos para los gatos.
2. Se debe retirar el tallo y el peciolo (rabo del tomate), ya que también contienen sustancias tóxicas para los gatos.
3. Antes de prepararlos, los tomates se deben lavar con abundante agua para eliminar los restos de suciedad, contaminantes o pesticidas que puedan estar adheridos a su piel.
4. Una vez lavados, se pueden ofrecer en crudo o cocinados, pues ambas presentaciones son aptas para los gatos. Es recomendable cortarlos en daditos pequeños, para que sean más fáciles de consumir.

Sobre los métodos de cocción, son recomendables aquellos que mantienen sus propiedades lo más intactas posible y que, además, no añaden calorías. Así pues, aconsejamos cocinarlos hervidos, escaldados, a la plancha, al microondas o al horno, siempre sin especias ni sal.

Si has decido incluir el tomate en la dieta de tu gato a modo de premio, puedes ofrecer 4-5 daditos, una o dos veces a la semana.

Si, por el contrario, has decidido introducir el tomate en la ración diaria de tu minino, deberás calcular la cantidad de tomate que debes añadir en función de las necesidades nutricionales de tu gato, las cuales variarán en función de su peso, su edad, su estado fisiológico y su nivel de actividad. Si habitualmente alimentas a tu gato con una ración casera, te recomendamos que pidas asesoramiento a un profesional especializado en nutrición animal, pues solo de esta manera podrás garantizar que la dieta de tu mascota es equilibrada y se ajusta a sus necesidades nutricionales. En este otro artículo encontrarás información sobre Qué comen los gatos.

Aunque, como hemos visto, los gatos pueden comer tomate rojo, existen ciertas situaciones en las que su aporte puede ser contraproducente:

• En gatos con alergias o intolerancias alimentarias.
• En gatos con problemas gastrointestinales (gastroenteritis agudas, enfermedad inflamatoria intestinal o IBD, linfoma digestivo, etc.).
• En gatos con un aparato digestivo especialmente sensible a los cambios de dieta.

Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Los gatos pueden comer tomate?, te recomendamos que entres en nuestra sección de Dietas caseras.

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