Gato persa
Reconocemos fácilmente al gato persa por su cara ancha y aplanada junto al abundante pelaje, que puede ser de distintos colores. Esta raza de gatos fueron introducidos en Italia desde la antigua Persia (Irán actualmente) sobre el año 1620, aunque se desconoce el auténtico origen. El estándar del gato persa actual, tal y como lo conocemos, se fijó en 1800 en Inglaterra y proviene de la raza de gato angora turco. No dudes en seguir leyendo esta ficha completa del gato persa y sus características, su origen y curiosidades, entre otras cosas, para poder tener una información más completa sobre él.
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Origen del gato persa
Tal y como hemos comentado en la introducción, el origen del gato persa es bastante desconocido y sin exactitud. Los antepasados de dicho gato los remontamos al año 1620, en Italia, donde fueron importados desde Persia y Jorasán por Pietro della Valle. Por otro lado, Nicholas Claude Fabri de Peiresc también exportó el gato de Angora (la actual Ankara, capital de Turquía) a Francia. A partir de aquí pasó a Gran Bretaña y se fue expandiendo por otros países.
El gato persa tiene el pelo largo y, gracias a la historia, se sabe que la aristocracia del siglo XIX ya pedía gatos de estas características. De hecho, en dicho siglo XIX, la reina Victoria de Inglaterra fue una entusiasta amante de los gatos persas y contribuyó significativamente a su popularidad en el mundo occidental. A través de la cría selectiva, se perfeccionaron las características físicas de los gatos persas, incluyendo su pelaje largo y denso, narices chatas y orejas pequeñas. Fue gracias a una hibridación con el gato de Pallas pudieron tener gatos con el pelo largo.
Características del gato persa
Para que podamos entender mejor el físico de este gato, vamos a mencionar las características del gato persa resumidamente. A continuación:
- Cara aplanada: los gatos persa cuentan con una cabeza redondeada junto a unos pómulos prominentes y un hocico corto o chato. Estas características acaban de dar forma a la cara aplanada de esta raza. Sus pómulos son prominentes y fuertes, además de tener una frente redondeada. El hocico es cortito y chato, en contraste con su mentón cargado de fuerza. Aquí tienes algunas otras "Razas de gatos de nariz chata".
- Ojos grandes: llenos de expresividad en contraste con las orejas pequeñas y redondeadas. Los ojos de los gatos persas tienen una forma muy redonda y, cuánto más separados estén el uno del otro, mejor.
- Orejas en "V": las orejas de la raza persa deben estar en simetría con su cabeza, por lo que deben formar una "V" desde los extremos donde están situadas hasta el mentón.
- Tamaño medio/grande: además, el gato persa es muy musculoso y redondeado. Su peso oscila entre los 6 y 7 kilos, dependiendo de si se trata de una hembra o un macho respectivamente. Si hablamos del tamaño de los gatos persas en centímetros, nos encontramos que miden entre 30 y 35 cm.
- Gruesas patas: una de las características del gato persa más destacadas es que tiene el cuerpo compacto, estilo Corby. Esto se debe a la ilusión óptica que genera su pelaje largo y sus gruesas patas.
- Cola corta: la cola de la raza persa no debe sobrepasar más de la mitad de su cuerpo, por lo que estamos hablando de que tiene una cola corta. En definitiva, estos gatos destacan sobre todo por ser toscos y macizos.
- Pelaje largo y abundante: además de ser espeso, tiene un tacto muy suave. Una curiosidad sobre los gatos persa es que tienen pelo entre los dedos de sus patitas, algo que los convierte en un animal muy solicitado. Si te interesan los datos curiosos, puedes echarle un vistazo al siguiente artículo de ExpertoAnimal con "Curiosidades de los gatos".
- Vocales suaves: los gatos persa no se caracterizan por ser altamente vocales. Más bien suelen tener maullidos suaves y melodiosos.
- Tipologías: para sorpresa de muchos, existen distintos tipos de persa. Es decir, dependiendo de sus colores, podemos hablar de un tipo de persa u otro. Vamos a verlas a continuación.
Tipos de gato persa
Aquí tienes toda la información sobre los tipos de persa que existen. ¡Atento!
- Persa sólido: estos gatos persas tienen un pelaje de un solo color sólido, como blanco, negro, azul, crema, chocolate o lila.
- Persa bicolor: tienen una combinación de blanco con otro color sólido. Por ejemplo, blanco con negro, blanco con crema, etc.
- Persa tricolor: tienen tres colores en su pelaje, generalmente blanco, negro y naranja (rojo). Estos gatos suelen ser hembras debido a la genética de los colores.
- Persa punto: tienen puntos más oscuros en las orejas, la cara, las patas y la cola, con un cuerpo más claro. Los colores de punto comunes incluyen el azul, el lila, el crema y el chocolate.
- Persa tabby: los persas tabby tienen patrones tabby en su pelaje, que pueden incluir rayas, manchas o remolinos en colores como marrón, plateado, crema, entre otros.
- Persa tortoiseshell: los persas tortoiseshell tienen un pelaje moteado de colores, generalmente negro y naranja, a menudo con blanco en el mix.
- Persa calicó: los persas calicó son similares a los tricolores pero con una mayor presencia de blanco en el pelaje.
- Persa Himalayo: los persas himalayos son una variante que combina las características físicas de los persas con un patrón de color similar al de los gatos siameses, con puntos más oscuros en áreas más frías del cuerpo. Ahora que ya conoces las principales características del gato persa, vamos a ver qué pasa con los colores que puede tener esta raza de gato.
Colores del gato persa
Los colores del manto del gato persa son muy variados:
- Blanco
- Negro
- Chocolate
- Rojizo
- Crema
Estos son algunos de los colores en el caso del pelaje sólido aunque también existen gatos de la raza bicolores, Tabby e incluso tricolores en el caso de las hembras. Por otro lado, el gato persa Himalayo cumple todas las características del persa común aunque su pelaje es similar al de los siameses, el pointed. Estos tienen siempre los ojos azules y pueden mostrarse en color chocolate, lila, crema, flama, carey o azul.
Carácter del gato persa
El gato persa es un gato familiar y tranquilo que encontraremos en multitud de ocasiones relajándose en el sofá, ya que pasa largas horas del día reposando. De hecho, una manera muy común de llamar a los gatos persa es decirles tigres del sofá porque están siempre estirados o durmiendo. Es una raza de gato extremadamente doméstica que no muestra actitudes típicas de sus parientes salvajes. Además observaremos que el gato persa es muy presumido y ostentoso: sabe que es un animal hermoso y no dudará en pavonearse varias veces por delante nuestro para conseguir caricias y atenciones.
Le gusta sentirse acompañado por personas, perros y otros animales. También se comporta maravillosamente con los niños si estos no le tiran del pelo y se comportan con él adecuadamente, ya que tiene un temperamento apacible y doméstico. Cabe añadir que es un gato muy goloso al que le convenceremos fácilmente de hacer trucos de todo tipo si le premiamos con golosinas.
Cuidados del gato persa
Vista toda esta información del gato persa, todavía quedan algunos detalles sobre esta raza de gatos. Por ello, a continuación vamos a hablar de cuáles son los cuidados del persa. Así, te asegurarás de mantener en buen estado su pelaje, su alimentación y su condición física.
- Alimentación: los gatos son animales carnívoros, por lo que es importante proporcionarles una dieta equilibrada que cumpla con todos los requisitos nutricionales. Esto significa que necesitan una fuente de proteína de alta calidad en su dieta. Busca alimentos que tengan carne, pollo, pavo, o pescado como los ingredientes principales. Para ello, puedes optar por alimentos comerciales de alta calidad para gatos, tanto secos como húmedos. Asegúrate de que el alimento esté formulado para gatos y sea adecuado para su etapa de vida (gatito, adulto o senior). Por otro lado, tienes que asegurarte de que tome agua.
- Higiene: el gato persa muda el pelo según la temporada, por ese motivo y para mantener la calidad del pelaje es muy importante cepillarles diariamente. Además evitaremos los enredos y las bolas del pelo en el estómago, ya que si se le llegan a formar nudos en estas zonas es muy probable que solo el veterinario pueda deshacerlos y quitarlos. En ningún caso podemos cortarles nosotros mismos los nudos o el pelo de la zona afectada. Ofrecerle un baño a nuestro gato si se ha ensuciado en exceso es una buena opción para prevenir la suciedad y los enredos. Debido a las características de su cara: los ojos redondos y la nariz corta, en ocasiones puede ser que el gato persa tenga complicaciones para lavarse las zonas ocular y nasal. Como tutores de nuestro nuevo amigo peludo, debemos facilitarle esta limpieza con un pañuelo húmedo o té de manzanilla. De esta manera, ayudamos a que la zona esté limpia y no se irrite. Sino, en el mercado encontraremos productos específicos para la raza que sirven para eliminar el exceso de grasa, la limpieza de los lagrimales o de los oídos. Puede interesarte este post de ExpertoAnimal donde explicamos "Cómo quitar los nudos del gato persa", para tener una información más completa.
- Ejercicio: aunque los gatos persa son muy tranquilos, también es necesario que realicen ejercicio. De lo contrario, podrían acabar en tendencias de sobrepeso u obesidad. Para evitarlo, tendrás que jugar con él de forma diaria para estimularlo mental y físicamente. Puedes hacerlo con distintos juguetes de caña de plumas o túneles en los que se divierta. Sino, puedes intentar sacarlo a pasear, aunque es una tarea mucho más complicada y requiere de paciencia.
Salud del gato persa
El gato persa es propenso a sufrir por culpa de la enfermedad renal poliquística o el síntoma de los testículos retenidos. La enfermedad renal poliquística es genética y afecta a los riñones del felino, por lo que le puede generar quistes llenos de líquido en uno o dos de los riñones. Si no se trata el problema con tiempo, puede acabar desencadenando una insuficiencia renal irreversible.
La segunda enfermedad más común en el gato persa es la atrofia progresiva de la retina, donde se crea una curvatura de la retina y puede generar ceguera al felino. También se trata de una enfermedad genética. Otras enfermedades que pueden afectar a tu gato persa son:
- Toxoplasmosis.
- Maloclusión.
- El síndrome de Chediak-Higashi.
- Anquilobléfaron congénita.
- Entropión.
- Epífora congénita.
- Glaucoma primario.
- Dermatitis del pliegue cutáneo.
- Cálculos en las vías urinarias.
- Displasia de cadera.
No dudes en echarle un vistazo a este otro artículo en concreto sobre las "Enfermedades más comunes del gato persa" en ExpertoAnimal.
Esperanza de vida del gato persa
La esperanza de vida de un gato persa depende de varios factores, incluyendo su cuidado, genética y salud general. En promedio, los gatos persas pueden vivir entre 12 y 16 años. Sin embargo, algunos persas bien cuidados han vivido incluso más de 16 años.
Tal y como hemos repasado en el anterior apartado, es importante destacar que los gatos persas son propensos a ciertos problemas de salud debido a su anatomía particular, como problemas respiratorios debido a su estructura facial achatada y problemas dentales debido a su mandíbula. Por lo tanto, un cuidado veterinario regular y una atención adecuada a su salud son cruciales para garantizar una vida larga y saludable para un gato persa.
Además, factores como la nutrición, el ejercicio y el entorno en el que vive el gato también influyen en su esperanza de vida. Proporcionarles una alimentación equilibrada, mantenerlos activos y asegurarse de que vivan en un entorno seguro y cómodo puede contribuir a una vida más larga y saludable para un gato persa.
¿Dónde adoptar un gato persa?
La cría de la raza gato persa está muy lejos de lo que era en los años 70, cuando se hacía en masa. Aún así, el gato persa, junto con el gato esfinge y el gato Maine coon, es de los más solicitados y populares en España. Son muchas las razones por las que merece la pena adoptar un gato persa. Entre ellas, podemos destacar su suave pelaje o su carácter dócil y apaciguado que le han otorgado el nombre de tigre del sofá.
Como de costumbre, en ExpertoAnimal fomentamos la adopción y no la compra de animales, por lo que la mejor manera de conseguir un gato con características persas es acudir a una protectora o asociación de animales que nos pueda ayudar.
Para todas aquellas personas que se preguntan cuánto cuesta un gato persa, la realidad es que su precio depende de la región en la que te encuentres, el linaje y la calidad del ejemplar. Como decimos, desde ExpertoAnimal no apoyamos la compra-venta de animales, por lo que hacemos apología de la adopción de gatos y perros sin tener que llegar a comprarlos.
Si ya tienes un gatito y quieres ponerle su nombre en un collar, te dejamos el siguiente enlace de Amazon donde puedes encontrar una placa personalizable donde grabar su nombre, teléfono de contacto y dirección de casa. De esta forma, si se pierde, alguien podrá ponerse en contacto contigo.
Curiosidades
- La obesidad es un problema muy grave en la raza persa que a veces se manifiesta tras la esterilización. Recomendamos acudir al veterinario y consultar el tipo de alimento adecuado.