Valdueza o perro montero Valdueza

Se trata de una de las razas de perros españoles más recientes, cuyo desarrollo ha empezado en la década de los 40 por iniciativa del Sr. Alfonso Álvarez de Toledo y Cabeza de Vaca, quien venía a ser el undécimo marqués de Valdueza. Vale la pena mencionar que tanto los Montes de Valdueza como el Valle de Osa o Valdueza se encuentran en el municipio español de Ponferrada, en la provincia de León.

La principal motivación de Toledo y Cabeza de Vaca para crear una nueva raza canina fue el deseo de obtener perros de caza y aptos para la montería que destacaran en terrenos montañosos, y en especial en las superficies de los Montes de Toledo, las Sierras de Extremadura y la Sierra Morena. Con este propósito, inicialmente se empezaron a cruzar ejemplares de podenco andaluz, que habían sido previamente seleccionados por su gran tamaño y pelaje mayormente áspero, con ejemplares de mastín extremeño seleccionados por su ligereza. Cabe aclarar que el llamado “mastín extremeño”, conocido también como “mastinete”, es uno de los tipos de mastín más pequeños y ligeros que fueron desarrollados en España, destacando un cuerpo visiblemente más corto y compacto que el reconocido mastín español o leonés, así como una mayor agilidad en los movimientos.

No obstante, años más tarde, el hijo de Alfonso, el Sr. Alonso Álvarez de Toledo y Urquijo, empezaría a cruzar los individuos nacidos de estos primeros cruces entre podencos andaluces y mastines extremeños con ejemplares de grifón vendeano. Como resultado, comenzarían a nacer los primeros representantes de la raza canina que hoy conocemos como valdueza.

Hoy en día, el valdueza ya es reconocido como una raza española tanto por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, como por la Real Sociedad Canina de España (RSCE), que es miembro de la Federación Cinológica Internacional (FCI) desde 1912. Sin embargo, aún no ha recibido un reconocimiento oficial por parte de las principales federaciones caninas europeas e internacionales, incluyendo la FCI.

Según el patrón racial publicado por la Real Sociedad Canina de España, el valdueza es un “perro grande, rústico pero elegante y de noble apariencia”. Respecto al tamaño, el mismo estándar determina que la altura a la cruz puede variar entre 67 cm y 75 cm en los machos, y entre 66 cm y 72 cm en las hembras. El dimorfismo sexual está bien marcado.

A simple vista, el cuerpo del perro valdueza puede parecer cuadrado, pero, en realidad, es ligeramente más largo que alto. El lomo y el cuello están bien musculados, el pecho es profundo, la grupa es larga y de buena anchura, mientras que el vientre no debe estar muy recogido. La cabeza del perro valdueza es siempre fuerte, pero sin volverse pesada, y su tamaño debe ser proporcional al conjunto del cuerpo. El cráneo es casi plano, con anchura casi idéntica a la longitud. El stop no está muy marcado, pero es evidente. Las mucosas y la trufa del valdueza están bien pigmentadas, pudiendo exhibir una variedad de tonalidades desde el color carne hasta el negro. Los ojos son almendrados y de tamaño mediano, con una expresión noble y viva. A su vez, las orejas del perro valdueza son de tamaño mediano e inserción alta.

Colores del perro valdueza

El manto del valdueza es liso, áspero y denso, ya que incluye una capa interna de subpelo, que también es conocida como lanilla interna. La longitud de los pelos externos suele variar entre 3 cm y 8 cm, siendo más cortos en la cabeza.

Respecto de los colores del perro valdueza, el patrón racial de la Real Sociedad Canina de España determina que es preferible el color blanco o encerado. También aclara que se admiten manchas color arena pálido en la cabeza y el cuerpo del can, pero las manchas oscuras no son deseables.

Uno de los rasgos más valorados en el carácter del perro montero valdueza es su alto grado de sociabilidad, mostrando mucha facilidad para convivir armoniosamente con las personas y otros perros. Ello está relacionado con el de hecho de que el perro valdueza, desde su desarrollo, ha cazado y trabajado junto a otros perros y humanos. Así mismo, una buena socialización temprana es muy recomendable para que el cachorro de valdueza pueda desarrollar plenamente su confianza y aprenda a gestionar sus propias emociones ante una diversidad de estímulos y entornos. Este proceso será clave para prevenir problemas de conducta en la edad adulta, así como para favorecer interacciones positivas con otros animales.

Los perros valdueza también destacan una gran inteligencia y responden sumamente bien al refuerzo positivo, logrando aprender una amplia gama de órdenes de obediencia, trucos y tareas mediante una adecuada motivación. De hecho, son reconocidos por su notable obediencia y docilidad, dos características que facilitan su proceso educativo y la generación de un vínculo de extrema lealtad con su tutor.

La timidez excesiva, la inseguridad y la agresividad no son rasgos comportamentales esperados ni mucho menos típicos del perro valdueza. Por lo general, suelen indicar problemas en su estilo de vida o en su ambiente, así como la exposición sistemática al encierro, los castigos físicos y un mal uso del regaño en la educación del can.

Aunque no sea un perro particularmente enérgico, el valdueza necesita practicar ejercicio físico moderado de forma regular para mantener un peso saludable y prevenir el sobrepeso y las enfermedades asociadas. Los paseos diarios, combinados con una estimulación mental y un ambiente enriquecido, también resultan indispensables para combatir los síntomas de estrés y aburrimiento, así como de problemas de conducta asociados a la destructividad o la ansiedad por separación. En ExpertoAnimal, te explicamos qué es el enriquecimiento ambiental para perros y cómo llevarlo a cabo en tu hogar.

Por otro lado, el mantenimiento del manto del valdueza resulta bastante sencillo, aunque sea necesario cepillar sus pelos con cierta regularidad (de 1 a 2 veces por semana) para evitar la formación de nudos y la acumulación de pelos muertos y suciedades. A su vez, los baños deben darse únicamente cuando el perro esté realmente sucio y siempre empleando productos de higiene aptos para uso canino. Recuerda que el exceso de baños contribuye a eliminar la capa natural de grasa que recubre y protege el cuerpo de tu peludo.

Finalmente, no olvides la importancia de invertir en la medicina preventiva para preservar la buena salud de tu mejor amigo. Aplicarle las vacunas esenciales previstas en el calendario para perros, realizar las desparasitaciones periódicas contra parásitos internos y externos, brindarle una alimentación completa y compatible con los requerimientos nutricionales de su edad, y llevarlo al veterinario al menos una o dos veces al año, son las pautas preventivas más básicas.

Aquí lo más importante es tomar en serio la educación del perro valdueza desde su llegada al hogar, y preferiblemente a partir de sus primeros meses de vida (pero la misma regla es válida en caso de que adoptes a un perro adulto). Para ayudarte, en ExpertoAnimal te explicamos "Cómo empezar a educar a un cachorro" y compartimos consejos prácticos para "Educar perros adultos adoptados".

En este mismo período, y preferiblemente antes de su tercer o cuarto mes de vida, deberás empezar a socializar a tu cachorro para fomentar la asimilación de un mayor número de recursos para gestionar sus propias emociones y una mayor diversidad de especies amigas. Por seguridad, no se recomienda sacar a la calle a los cachorros sin vacunas, pero puedes iniciar su socialización presentándolo a otros perros y animales que sepas que están sanos, vacunados y desparasitados, ya sea en tu casa o en un entorno seguro, así como a personas ajenas a su núcleo familiar. Luego, cuando tu compañero haya completado su primer ciclo de vacunas, podrás empezar a pasearlo en la calle, parques, plazas y otros sitios al aire libre, para darle la oportunidad de seguir interactuando con una mayor variedad de individuos, entornos y estímulos.

Este también será el momento perfecto para enseñar a tu cachorro a hacer sus deposiciones en la calle y comenzar a presentarle algunas órdenes básicas de obediencia para estimular su inteligencia y fomentar un comportamiento más confiable dentro y fuera del hogar. Si te gustaría adiestrar a tu perro en casa (y recomendamos que lo hagas), recuerda empezar por las órdenes más sencillas y trabajarlas siempre una a una hasta que tu peludo sea capaz de reproducirlas de una manera fluida, en sesiones de adiestramiento cortas de 10 a 15 minutos.

Tratándose de una raza canina bastante reciente, el registro de enfermedades hereditarias en los perros valdueza aún es muy escaso. Sabemos que son perros fuertes y resistentes que provienen de otras razas caninas que destacan por tener una salud muy sólida. De hecho, a día de hoy, no se conocen enfermedades congénitas propias del podenco andaluz, que tampoco es propenso a padecer patologías graves. Por otro lado, los mastines españoles tienen cierta predisposición a enfermedades degenerativas comunes en perros grandes y gigantes, como la displasia de cadera, así como al entropión. Así pues, no sería extraño que dichas patologías pudieran presentarse en los perros valdueza, en especial en los individuos de edad más avanzada. No obstante, teniendo en cuenta que su proceso de desarrollo ha puesto mucha atención en la selección de los individuos reproductores, podemos esperar una menor predisposición genética en el perro montero valdueza.

En líneas generales, su esperanza de vida se sitúa entre 12 y 14 años, aunque algunos individuos hayan vivido más en condiciones óptimas.

Como vimos, esta es una raza de perros españoles bastante reciente y su crianza aún se realiza de forma bastante localizada en su tierra natal. En consecuencia, la manera más fácil y segura de hacerte con un cachorro de valdueza es entrando en contacto con los criadores reconocidos y avalados por las instituciones que reconocen este perro como una raza debidamente constituida, como es la Real Sociedad Canina de España.

No obstante, desde ExpertoAnimal, no fomentamos la compraventa de animales de compañía, tanto porque esto supone tratarlos como una mercancía, como porque hay suficientes evidencias de que esta práctica contribuye al aumento de los casos de abandono y, en consecuencia, al incremento de la población callejera y la sobrecarga de los refugios y protectoras que trabajan rescatando los animales abandonados o nacidos en las calles de condiciones insalubres. Por ello, nuestro consejo, si te gustaría tener un mejor amigo con características físicas y comportamentales similares a las del perro valdueza, es que entres en contacto con una protectora o refugio de animales cerca de tu domicilio para agendar una visita y conocer los perros disponibles para adopción. Allí tendrás grandes probabilidades de encontrar un peludo compatible con tu personalidad, tu estilo de vida e incluso con tus preferencias estéticas. Además, este perro será el más agradecido y devoto compañero que podrías soñar en tener a tu lado. Y si tienes dudas sobre el paso a paso del proceso adoptivo, puedes leer el siguiente artículo: “¿Cómo adoptar un perro?”.