Animales que cambian de color

Existen diversas especies capaces de modificar su apariencia. Muchos animales cambian de color para esconderse, por lo que se trata de un método de defensa. Sin embargo, este no es el único motivo. Además, el cambio de color no solo ocurre en especies como los camaleones, capaces de modificar el tono de su rugosa piel. Otras especies transforman o mudan el color de sus mantos por diversos motivos. Estas son las principales causas que explican el por qué los animales cambian de color:

• Supervivencia: huir de los depredadores y camuflarse en el entorno es la razón principal del cambio de color. Gracias a esto, el animal pasa desapercibido para huir o esconderse. Este fenómeno recibe el nombre de protección variable.
• Termorregulación: otras especies modifican el color de acuerdo con la temperatura. Gracias a esto, absorben mayor cantidad de calor durante temporadas frías o se refrescan en el verano.
• Apareamiento: modificar el color del cuerpo es una forma de atraer al sexo opuesto durante la época de apareamiento. Colores vistosos y brillantes llaman la atención de la posible pareja de forma exitosa.
• Comunicación: los camaleones son capaces de cambiar de color de acuerdo con su estado de ánimo. Gracias a esto, funciona como una manera de comunicarse con sus congéneres.

Ahora sabes por qué los animales cambian de color, pero ¿cómo lo hacen? Te lo explicamos a continuación.

Los mecanismos que los animales utilizan para cambiar de color son variados, pues sus estructuras físicas son diferentes. ¿Esto qué significa? Un reptil no cambia de la misma manera que lo hace un insecto y viceversa.

Por ejemplo, los camaleones y los cefalópodos cuentan con células denominadas cromatóforos, las cuales contienen diversos tipos de pigmentos. Se ubican en las tres capas externas de la piel y cada capa alberga pigmentos correspondientes a colores distintos. De acuerdo con lo que necesiten, los cromatóforos se activan para modificar el color de la piel.

Otro mecanismo que interviene en el proceso es la visión, necesaria para descifrar los niveles de luz. Dependiendo de la cantidad de luz que existe en el ambiente, el animal requiere que su piel vista distintos tonos. El proceso es simple: el glóbulo ocular descifra la intensidad luminosa y transporta la información a la hipófisis, hormona que segrega en el sangre componentes que alertan a la piel sobre el color que la especie requiere.

Algunos animales no modifican el color de la piel, pero sí sus pelajes o plumajes. Por ejemplo, en las aves el cambio de coloración (la mayoría posee plumas pardas al principio de su vida) responde a la necesidad de diferenciar hembras y machos. Para ello, el plumaje pardo se cae y aparece el color característico de la especie. Lo mismo ocurre con los mamíferos que cambian el color del pelaje, aunque la razón principal es camuflarse en el cambio de estaciones; por ejemplo, ostentar pelaje blanco durante el invierno en zonas nevadas.

Esto responde a la pregunta sobre cómo cambia de color los animales. A continuación, ¡descubre muchas especies que lo hacen!

Ya conoces por qué los animales cambian de color y cómo lo hacen. Ahora bien, ¿qué animales cambian de color? Te hablaremos sobre estas especies:

• Trioceros de Jackson
• Araña cangrejo amarilla
• Pulpo mimo
• Sepia común
• Lenguado común
• Sepia llamativa
• Platija europea
• Escarabajo de la tortuga
• Anole americano
• Zorro ártico

El trioceros de Jackson (Trioceros jacksonii) es uno de los camaleones que es capaz de realizar mayor número de cambios de color, pues adopta entre 10 y 15 tonos distintos. La especie es originaria de Kenia y Tanzania, donde vive en áreas de entre 1.500 y 3.200 metros de altura.

La coloración original de estos camaleones es verde, ya sea solo o con zonas amarillas y azules. Además, posee tres cuernos sobre la cabeza.

Se trata de un arácnido que se encuentra entre los animales que cambian de color para esconderse. La araña cangrejo amarilla (Misumena vatia) mide entre 4 y 10 mm y habita en América del Norte.

La especie posee cuerpo plano y patas alargadas y separadas, razón por la cual recibe el nombre de cangrejo. El color es variable entre castaño, blanco y verde claro; sin embargo, adapta su cuerpo a las flores donde se ubica para cazar, por lo que viste su cuerpo de brillantes tonos amarillos y blancos manchados.

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La habilidad para esconderse del pulpo mimo (Thaumoctopus mimicus^[1]) es realmente impresionante. Se trata de una especie que habita las aguas que rodean Australia y los países asiáticos, donde es posible encontrarlo a un máximo de 37 metros de profundidad.

Con la intención de ocultarse de los depredadores, este pulpo es capaz de adoptar los colores de casi veinte especies marinas diferentes. Estas especies son heterogéneas e incluyen medusas, serpientes, peces y hasta cangrejos. Además, su flexible cuerpo es capaz de imitar la forma de otros animales, como las mantarrayas.

La sepia común (Sepia officinalis) es un molusco que habita en el noreste del océano Atlántico y el mar Mediterráneo, donde se encuentra mínimo a 200 metros de profundidad. Mide un máximo de 490 mm y pesa hasta 2 kilos.

Las sepias viven en zonas arenosas y fangosas, donde se esconden de los depredadores durante el día. Al igual que los camaleones, su piel posee cromatóforos, los cuales le permiten cambiar el color para adoptar patrones variados. En la arena y los sustratos unicolores, conserva un tono uniforme, pero presenta motas, puntos, rayas y colores frente a ambientes heterogéneos.

El lenguado común (Solea solea) es otro pez capaz de modificar el color de su cuerpo. Habita las aguas de la zona atlántica y mediterránea, donde se encuentra a un máximo de 200 metros de profundidad.

El lenguado posee un cuerpo aplanado que le permite enterrarse en la arena para esconderse de sus depredadores. Además, modifica ligeramente su color de piel, tanto para protegerse como para cazar los gusanos, moluscos y crustáceos que conforman su dieta.

La sepia llamativa (Metasepia pfefferi) se distribuye en el océanos Pacífico e Índico. Vive en zonas arenosas y de pantano, donde su cuerpo se camufla a la perfección. Sin embargo, esta variedad es venenosa; por esta razón, cambia su cuerpo a un brillante tono rojo cuando se siente amenazada. Con esta transformación, le indica a su depredador sobre su toxicidad.

Además, es capaz de camuflarse con el ambiente. Para ello, el cuerpo de esta sepia contiene 75 componente cromáticos que adoptan hasta 11 patrones de color diferentes.

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Otro de los animales marinos que cambian de color para esconderse es la platija europea (Platichthys flesus^[2]). Se trata de un pez que habita a 100 metros de profundidad, desde el Mediterráneo hasta el mar Negro.

Este pez plano utiliza el camuflaje de distintas formas: la principal es esconderse bajo la arena, tarea sencilla por la forma de su cuerpo aplanado. Además, es capaz de adaptar su color al lecho marino, aunque el cambio de color no es tan impresionante como el que se da en otras especies.

Otro de los animales que cambian de color es el escarabajo de la tortuga (Charidotella egregia). Se trata de un coleóptero cuyas alas reflejan un llamativo color dorado metálico. Sin embargo, frente a situaciones de estrés, su cuerpo transporta los fluidos hacia las alas y estas se tornan de un intenso color rojo.

Esta especie se alimenta de hojas, flores y raíces. Además, el escarabajo tortuga es uno de los más llamativos que existen.

El Anolis carolinensis^[3]es un reptil originario de Estados Unidos, pero que actualmente puede encontrarse en México y varias islas centroamericanas. Habita en bosques, praderas y estepas, donde prefiere vivir en los árboles y sobre las rocas.

El color original de este reptil es verde brillante; sin embargo, su piel adopta un tono castaño oscuro cuando se siente amenazado. Al igual que los camaleones, su cuerpo posee cromatóforos.

También existen algunos mamíferos capaces de cambiar de color. En este caso, lo que cambia no es la piel, sino el pelaje. El zorro ártico (Vulpes lagopus) es una de estas especies. Habita en las zonas árticas de América, Asia y Europa.

El pelaje de esta especie es castaño o grisáceo durante las épocas cálidas. Sin embargo, muda de manto cuando se acerca el invierno, para adoptar una coloración blanca brillante. Este tono le permite camuflarse en la nieve, habilidad que requiere para esconderse de posibles ataques y cazar a sus presas.

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Además de los mencionados, existen muchos animales que cambian de color para esconderse o por otras razones. Estos son algunos de ellos:

• Araña cangrejo (Misumenoides formosipes)
• Gran pulpo azul (Cyanea octopus)
• Camaleón enano de Smith (Bradypodion taeniabronchum)
• Caballito punteado (Hippocampus erectus)
• Camaleón de Fischer (Bradypodion fischeri)
• Caballito narizón (Hippocampus reidi)
• Camaleón de Ituri (Bradypodion adolfifriderici)
• Caboso de los charcos (Gobius paganellus)
• Calamar común (Doryteuthis opalescens)
• Pulpo abisal (Graneledone boreopacifica)
• Sepia gigante australiana (Sepia apama)
• Calamar común de anzuelo (Onychoteuthis banksii)
• Dragón barbudo (Pogona vitticeps)

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