¿Los perros pueden comer pulpo?

El pulpo no es un ingrediente habitual en los piensos comerciales para perros, puesto que su coste suele ser bastante elevado. Sin embargo, se trata de un alimento perfectamente apto para los perros, puesto que posee un gran valor nutricional y no contiene ningún ingrediente que resulte tóxico para su organismo. Ahora bien, hablamos de los perros pueden comer pulpos cocido.

¿Los perros pueden comer pulpo crudo?

Ahora bien ¿es recomendable que los perros consuman pulpo crudo? Lo cierto es que no. El pulpo puede contener microorganismos patógenos capaces de ocasionar una enfermedad de transmisión alimentaria en los perros. Aunque existe la creencia de que la congelación destruye los microorganismos, lo cierto es que muchos de estos agentes patógenos pueden sobrevivir al proceso de congelación y multiplicarse en el alimento descongelado. Por ello, el pulpo siempre debe ofrecerse cocinado, pues será la única manera de garantizar que su aporte sea seguro.

Como hemos mencionado, el pulpo es un alimento con un gran valor nutricional. Sus principales beneficios nutricionales son los siguientes:

• Es un alimento rico en proteínas de alto valor biológico, lo que significa que tiene una elevada proporción de aminoácidos esenciales (los aminoácidos esenciales son aquellos que el organismo no es capaz de sintetizar y que deben ser consumidos con la dieta).
• Tiene un contenido en grasa muy bajo y su aporte de hidratos de carbono es nulo, lo que hace que el pulpo sea un alimento hipocalórico. Es decir, incluir el pulpo en la dieta de los perros permite incrementar el aporte de proteínas sin aumentar considerablemente la carga calórica de la ración. Por ello, es un alimento especialmente recomendable en animales con obesidad o con tendencia al sobrepeso. Te dejamos algunas "Recetas para perros con sobrepeso" que te pueden interesar.
• Es una fuente de vitamina B12 (o cianocobalamina), aporta cantidades considerables de vitamina B3 (niacina) y vitamina B6 (piridoxina) y cantidades algo menores de vitamina B1 (tiamina), vitamina A y E.
• También es una fuente de minerales como el selenio, yodo, fósforo, calcio y sodio. También aporta, aunque en menor medida, zinc, hierro y magnesio.

Incluir el pulpo en la dieta diaria de los perros puede suponer un incremento considerable del precio de su ración. Por ello, te recomendamos que si quieres ofrecer este alimento a tu amigo peludo, lo hagas de forma ocasional, empleándolo a modo de premio o recompensa.

Por ejemplo, una vez a la semana o cada dos semanas, puedes ofrecerle 2 rodajas de pulpo a tu perro si es de raza pequeña, 3-4 si es de raza mediana y 5-6 si es de raza grande.

Como hemos comentado al principio del artículo, el pulpo debe ofrecerse siempre cocinado. La opción más sencilla es comprar el pulpo directamente cocido, puesto que hoy en día es muy habitual encontrar en los lineales de los supermercados los tentáculos de pulpo ya cocidos y envasados al vacío.

No obstante, si lo prefieres, puedes optar por cocinarlo en casa. Si te decantas por esta opción, te recomendamos que sigas los siguientes pasos:

1. Para que el pulpo quede más tierno, es recomendable congelarlo antes de cocinarlo. Si quieres ahorrarte este paso, pueden comprar el pulpo directamente congelado.
2. Un día antes de cocinar el pulpo, sácalo del congelador y colócalo en el frigorífico para que se descongele lentamente.
3. Una vez descongelado, lava el pulpo con agua fría para eliminar posibles impurezas
4. A continuación, calienta agua en una cazuela y cuando rompa a hervir, mete y saca el pulpo 3 veces de la cazuela. Tras ello, introduce completamente el pulpo en el agua hirviendo y deja que cueza unos 25-30 minutos a fuego medio.
5. Una vez listo, déjalo enfriar y córtalo en rodajas de medio centímetro para ofrecérselas a tu perro a modo de premio.

A la hora de cocinarlo no será necesario añadir sal, y en ningún caso deberán añadirse otros ingredientes como pimentón, ajo o cebolla.

En principio, el consumo de pulpo no tiene por qué ocasionar ningún efecto indeseado en la salud de los perros. No obstante, es posible que los perros con un aparato digestivo especialmente sensible a los cambios de dieta desarrollen algunos signos digestivos leves (como flatulencias o heces más sueltas).

Además, también es posible que los perros desarrollen una alergia alimentaria al pulpo. De hecho, los pescados y mariscos se encuentran entre los alimentos más alergénicos que existen. Te damos más información sobre la "Alergia alimentaria en perros: síntomas y tratamiento" en el siguiente post de ExpertoAnimal.

Aunque el pulpo es un alimento apto para los perros, existen algunos casos en los que su aporte puede estar contraindicado, como por ejemplo:

• En perros con alergias o intolerancias alimentarias.
• En perros con un aparato digestivo muy sensible a los cambios de dieta.
• En perros con patologías gastrointestinales.

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