Animales aéreos - Ejemplos y características

En general, animales voladores y animales aéreos son sinónimos, aunque existen excepciones que mostraremos a lo largo del artículo en las que "volador" y "aéreo" no significan lo mismo. Al margen de este dato, los animales aéreos son aquellos que utilizan el vuelo como mecanismo de locomoción. Para algunos animales esta es su única forma de desplazarse, pero muchos otros la usan como vía de escape ante la presencia de un depredador.

Ciertos animales pasan la mayor parte de su vida volando, realizando en el aire todas sus funciones vitales: comer, relacionarse con su medio y congéneres o reproduciéndose. Para ellos, volar es imprescindible para vivir. Otros animales solo adquieren la capacidad de vuelo cuando llegan a su etapa adulta. Algunas especies son capaces de recorrer largas distancias volando, como los animales migratorios, otros solo necesitan volar pequeños tramos.

Cada especie animal o grupo de animales tiene una mecánica distinta para conseguir desplazarse mediante el vuelo, por lo tanto, poseerán características diferentes aunque similares, ya que el fin último es el mismo: volar.

Esta es la excepción que comentábamos en el apartado anterior, en la que "aéreo" y "volador" no se utiliza como términos sinónimos. Los animales que planean sí se consideran animales aéreos pero no voladores. Esto es así debido a que no pueden volar pero sí se desplazan por el aire. Para ello, estos animales cuentan con cuerpos pequeños y ligeros y una membrana de piel muy fina que une las extremidades. De esta forma, al saltar estiran sus patas y utilizan esta membrana para planear. Dentro de este grupo encontramos tanto mamíferos como reptiles.

Cada especie animal voladora tiene su propia forma de volar según sus características físicas, pero la mayoría de estos animales deben poseer una serie de atributos comunes que permiten el vuelo:

• Alas: todos los animales voladores tienen alas. En algunos casos, estas alas son modificaciones de los miembros anteriores del cuerpo, como en aves o mamíferos voladores (murciélagos), donde los huesos se han ido modificando a lo largo de la evolución aportando la capacidad o mejorándola. Otros animales han desarrollado alas, por lo que se conoce como convergencia evolutiva, es decir, por presiones ambientales similares. Este es el caso de los insectos.
• Bajo peso: para que un animal pueda volar no debe ser muy pesado. Las aves han reducido el peso de sus huesos aumentando la porosidad de estos, haciendo que sean más ligeras. Los invertebrados voladores pesan poco, ya que el material del que está constituido su exoesqueleto es muy ligero. Aquellos animales voladores que tienen un peso mayor no pueden volar largas distancias porque no pueden mantenerse mucho tiempo en vuelo.
• Capacidad cardíaca: tanto los músculos encargados del vuelo como el propio músculo cardíaco están muy desarrollados en los animales voladores. El vuelo gasta muchísima energía y debe llegar una mayor cantidad de oxígeno a los músculos. Para que esto ocurra, la frecuencia cardíaca es muy alta y las concentraciones de hemoglobina en sangre (proteína que transporta el oxígeno en la sangre) también.
• Forma aerodinámica: la forma del cuerpo también es importante. Reducir la resistencia que ejerce el cuerpo contra el aire sirve para ser más eficiente en el vuelo. Tener una forma menos aerodinámica no implica no poder volar, pero sí hacerlo más lento.

Existen distintos tipos de animales aéreos según el filo al que pertenezcan. Así, tenemos los siguientes tipos de animales voladores:

• Mamíferos aéreos, que son los quirópteros o murciélagos. No podemos considerar otros mamíferos como la ardilla voladora como animal volador pero sí como animal aéreo, pues realmente no vuela, solo planea. Los únicos mamíferos realmente voladores son los murciélagos.
• Aves, pero no todas ellas son animales aéreos, puesto que hay varias especies que por su peso o ausencia de alas no pueden volar. Algunas de las aves que no vuelan son los kiwis, los avestruces o los ya extintos dodos.
• Invertebrados, aunque solo los animales pertenecientes a la clase Insecta tienen alas y pueden volar. En estos animales las alas solo aparecen y son funcionales en la edad adulta. Algunos insectos no tienen alas cuando son adultos pero se debe a una adaptación evolutiva llamada neotenia o mantenimiento de los caracteres juveniles.

Como hemos comentado, la inmensa mayoría de aves son animales aéreos. Un ejemplo muy claro son los vencejos. Estos animales, tras dejar el nido, pasan toda su vida en el aire. Se alimentan abriendo el pico y cazando mosquitos, cortejan a sus parejas mientras vuelan, incluso pueden copular en el aire.

Otros ejemplos de animales aéreos son:

• Las psitácidas o loros también son animales aéreos a pesar de ser unos trepadores ejemplares. Muchas psitácidas migran y, para ello, deben tener una buena capacidad de vuelo.
• El murciélago frugívoro de cabeza de martillo, especie más grande de murciélago africano, como el resto de quirópteros, es un animal aéreo. Nocturno, pasa las horas del día durmiendo y se alimenta de frutas, aunque también de aves domésticas o carroñeras.
• La mariposa monarca es un buen ejemplo de animal aéreo perteneciente al grupo de los insectos, pues en su ciclo vital realizan unas de las migraciones más largas del planeta.

Lo habitual es que vuele a unos 4.000 metros por encima del nivel del mar, aunque se han encontrado ejemplares con la capacidad de superar los 6.000 metros.

Es el ave voladora con la capacidad de volar más alto, llegando a superar los 11.000 metros de altura.

Es el ave más rápida en vuelo horizontal, alcanzando los 200 km/h.

Este tipo de colibrí es el ave más pequeña del mundo (pesa menos de 2 gramos) y puede alcanzar una velocidad de 50 km/h.

Esta es una de las variedades de cucaracha con alas, por lo que tiene la capacidad de volar. Su tamaño es reducido, ya que apenas alcanza los 2 cm de longitud.

El gaviotín o charrán ártico es un ave de tamaño pequeño (25-40 cm) que destaca por sus viajes migratorios, recorriendo desde el Ártico hasta la Antártida y sumando, así, más de 40.000 km.

El flamenco común es una de las aves migratorias más conocidas en todo el mundo, por lo que son animales que vuelan recorriendo largas distancias. Viaja en función de la disponibilidad de alimentos y puede ir desde África Occidental hasta el Mediterráneo.

Este tipo de libélula está considerado como el insecto migratorio que recorre una distancia más larga, pudiendo superar los 18.000 km de distancia.

Es la mariposa más grande del mundo, ya que puede llegar a medir hasta 30 cm con las alas completamente abiertas. Eso sí, debido precisamente a su gran tamaño, su vuelo es más pesado y lento que el de las especies más pequeñas.

El ruiseñor es un ave conocida por su precioso canto, y es que este pequeño pájaro es capaz emitir tonalidades muy variadas, aprendidas de sus padres y transmitidas a su hijos.

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