Mi cobaya no se mueve y tiembla
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Las cobayas, Cavia porcellus, son animales de sobra conocidos por los amantes de los animales, aunque todavía no han alcanzado la popularidad de la que gozan los perros o, incluso, los gatos. Por este motivo, los cuidadores que se enfrentan al mantenimiento de una cobaya, sobre todo si lo hacen por primera vez, van a plantearse muchas dudas.
En este artículo de ExpertoAnimal vamos a ofrecer información acerca de la salud de nuestras cobayas, concretamente, responderemos a la pregunta sobre por qué una cobaya no se mueve y tiembla. Si convives con cobayas, ¡te interesa seguir leyendo!
Índice
¿Mi cobaya está enferma?
Las cobayas son animales relativamente fáciles de cuidar, pero requieren atención ya que, cualquier trastorno, si no recibe el tratamiento adecuado, puede incluso acabar con su vida en muy poco tiempo. Por eso, además de dispensarle los cuidados adecuados respecto a alimentación, entorno, ejercicio, higiene o afecto, debemos observar y conocer sus costumbres para detectar si se produce algún cambio susceptible de indicar que se está mermando su salud.
Síntomas de una cobaya enferma
A continuación te mostraremos los síntomas más frecuentes de una cobaya enferma:
- Pérdida de apetito
- Inmovilidad
- Secreción ocular
- Secreción nasal
- Problemas de la piel o del pelo
- Diarrea
- Arrastra las patas traseras
- Tiembla
- Presencia de sangre en el ano
- Etc.
Ante cualquiera de los síntomas anteriormente mencionados, debemos acudir al veterinario urgentemente, con preferencia a una clínica con profesionales expertos en cobayas, es decir, una clínica de animales exóticos. Si vemos que nuestra cobaya no se mueve y tiembla podemos estar ante una anemia. En el siguiente apartado vamos a explicar en qué consiste.
La anemia en las cobayas
La anemia es el descenso en el número de glóbulos rojos presentes en la sangre. Se puede manifestar en los siguientes signos:
- Falta de brillo en el pelo, que se observará mate, como sin vida.
- Letargo o inmovilidad, será evidente que nuestra cobaya ha disminuido su actividad. La veremos mucho tiempo quieta, sin atender a los estímulos que le ofrecemos.
- Puede haber, también, una pérdida de apetito. Nuestra cobaya no querrá comer ni siquiera sus alimentos favoritos, aunque hay que saber que existen cobayas con anemia que siguen comiendo con normalidad.
- Palidez de mucosas, que mostrarán un tono blanquecino o rosado. Podemos observarle, con cuidado, el interior del ojo para comprobar el color. También se puede apreciar esta palidez en las encías.
- En casos agudos se van a presentar temblores.
Por lo tanto, si nuestra cobaya no se mueve y tiembla podemos sospechar que estamos ante una anemia. Por supuesto, requiere atención veterinaria.
Causas de la anemia
Nuestra cobaya puede padecer anemia a causa de un dieta deficiente pero, también, esta puede deberse a un problema de absorción intestinal, de forma que se presenten dificultades para aprovechar las vitaminas y los minerales que la cobaya ingiere con la dieta. Además, hay que saber que existen anemias consecuencia de otras alteraciones.
Por ejemplo, si nuestra cobaya padece escorbuto, enfermedad consistente en una carencia de vitamina C, es fácil que tenga hemorragias y va a ser esta pérdida de sangre la que esté provocando la anemia. Será nuestro veterinario quien, partiendo de una cobaya que no se mueve y tiembla, establezca el diagnóstico y nos prescriba el tratamiento adecuado.
¿Cómo evitar la anemia en cobayas?
Obviamente, si nuestra cobaya no se mueve y tiembla por una anemia debida a un fallo en la absorción intestinal, no va a depender de nuestros cuidados pero, si, al contrario, la anemia tiene su origen en una mala alimentación, debemos corregir esta para recuperar y mantener su salud.
La dieta recomendada para una cobaya adulta y sana consta de los siguientes elementos:
- Heno, que debe constituir la mayor parte de su dieta, en un porcentaje de, aproximadamente, el 75 %.
- Pienso especialmente formulado para cobayas, que alcance el 20 % de su alimentación diaria.
- Verduras ricas en vitamina C, como pueden ser las espinacas, la col, la remolacha, la endivia o el perejil. Debe constituir el 5 % de su dieta.
- Las frutas y los cereales solo deben darse como premio, es decir, ocasionalmente.
- En algunos casos en los que la dieta no cubra las necesidades de vitamina C (recordemos que su falta puede provocar escorbuto) puede ser conveniente suplementar, según las pautas indicadas por nuestro veterinario.
Las cobayas menores de 6 meses, así como las que se encuentran en período de gestación, pueden tener que ajustar esta dieta tipo para que se adapte a sus mayores necesidades de determinados nutrientes, como pueden ser la propia vitamina C o el calcio. Consultando con nuestro veterinario conseguiremos mantener siempre bien alimentada a nuestra cobaya.
Causas de temblores en las cobayas no patológicos
A veces podemos observar que nuestra cobaya no se mueve y tiembla cuando la cogemos. Estos animales son muy expresivos en cuanto a la comunicación corporal y verbal, adoptando diferentes posturas, movimientos y emitiendo chillidos diversos. Si al coger a nuestra cobaya esta tiembla puede querer expresar que tiene miedo o está enfadada y es su forma de decirnos que la soltemos, lo que a veces se acompaña de un sonido similar a un ronroneo.
Este mismo ronroneo, en otras circunstancias, puede ser indicativo de bienestar. La cobaya también despliega toda esta comunicación en su relación con otras cobayas. En estos casos, como vemos, no estamos ante ninguna patología. Según vayamos conviviendo con nuestra cobaya con más facilidad iremos reconociendo todas sus señales. Se recomienda que la manipulemos, al principio, con mucha calma y tranquilidad, pues son animales que se pueden asustar fácilmente. Con paciencia seguro que conseguiremos una convivencia armónica.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
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