Nolotil para gatos - Dosis y usos

Sí, pero no siempre. El Nolotil es un fármaco con efecto analgésico y antipirético. Esto quiere decir que calma el dolor y disminuye la fiebre. Con más precisión, se trata de un analgésico no opioide. Además, presenta un ligero efecto antiinflamatorio y antiespasmódico, disminuyendo los procesos inflamatorios y proporcionando una relajación suave del músculo liso. Se incluye en el grupo de las pirazolonas.

Su principio activo es el metamizol, que puede ser magnésico o sódico. También podemos encontrarlo con el nombre de dipirona o novalgina. Se metaboliza en el hígado. Es importante señalar que el Nolotil es un fármaco de uso humano, por ello el Nolotil para gatos no es la primera opción de tratamiento en esta especie. Se prefieren medicamentos especialmente formulados para gatos, que garantizan una mayor seguridad, además de eficacia, como puede ser el meloxicam. Por lo tanto, si pensamos que nuestro gato puede estar experimentando dolor, la indicación es, en todos los casos, acudir al veterinario. Solo este profesional puede decir si le podemos dar Nolotil a nuestro gato.

Otra duda muy frecuente es si los gatos pueden tomar paracetamol. Si tú también tienes dudas, te animamos a leer este otro artículo de ExpertoAnimal sobre ¿Puedo dar paracetamol a mi gato?

En general, el Nolotil se utiliza en aquellos procesos agudos, es decir, que se inician de manera repentina, y que se considera que originan un dolor de intensidad media o moderada. Así, suele prescribirse para:

• Dolor a nivel visceral.
• Dolor de origen traumático.
• Dolor por artritis, neuralgias o neuritis.
• Distocias o dificultades de expulsión durante el parte.
• Fiebre.

Cuando se valora que el dolor es fuerte, siempre dentro de los iniciados de manera aguda, es posible utilizar Nolotil, pero por vía inyectable. En cualquier caso, la valoración del cuadro clínico del gato es competencia exclusiva del veterinario. Este profesional también puede recurrir a este principio activo como parte del protocolo preanestésico, es decir, los fármacos que se escogen para preparar al gato para una operación quirúrgica. En este caso, se busca su efecto analgésico de manera preventiva. De esta forma, se puede utilizar menor anestesia durante la intervención y la recuperación posoperatoria requiere de menos medicación.

Puesto que los gatos no suelen mostrar signos de dolor, te dejamos este otro artículo sobre 10 signos de dolor en gatos para que sepas identificarlo rápido.

La dosis de Nolotil necesaria para nuestro gato solo puede determinarla el veterinario y esta se decide en función de su cuadro clínico y de sus características. Además, también varía dependiendo de la vía de administración. Esta puede ser intramuscular, subcutánea o intravenosa, que suministrará el veterinario, u oral, de la que podríamos encargarnos en el hogar.

A modo de ejemplo, una dosis de Nolotil inyectable por vía intramuscular o intravenosa, estaría alrededor de los 0,2 ml por cada 5 kg de peso del gato. Esta dosis puede darse dos o tres veces al día o tan solo una, según el criterio del veterinario. Por vía oral puede administrarse en forma de gotas directamente en la boca del gato o diluidas en agua y repetirse la toma cada 4-6 horas. Por supuesto, siempre se hace necesaria la supervisión del tratamiento por parte del veterinario. Además, en el caso de que estos sean prolongados, hay que evaluar al gato de manera periódica.

El metamizol o Nolotil no se recomienda para los gatos en los siguientes casos:

• Si están tomando otros fármacos, como los barbitúricos, la clorpromazina o la fenilbutazona.
• Si sufren alguna alteración en las células de la sangre.
• Cuando están diagnosticados de enfermedad gastrointestinal crónica, hepática o renal.
• Por supuesto, en los gatos alérgicos a este principio activo.
• No se recomienda para gatas en estado de gestación ni durante el período de lactancia, ya que pasa a la leche materna.
• Hay que extremar las precauciones en el caso de gatos de edad muy avanzada o los que presentan enfermedades cardiovasculares.

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Estamos ante un fármaco seguro, por lo que es difícil que provoque algún efecto adverso o, menos aún, una intoxicación. Sí podemos señalar que cuando el metamizol se administra en inyección subcutánea puede provocar una irritación justo en el punto de inoculación. También hay que tener en cuenta que aumenta el riesgo de hemorragia por supresión en la formación de protrombina, que es una proteína que forma parte del proceso de coagulación. Por último, una sobredosificación de este medicamento puede provocar convulsiones.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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