Leucemia felina - Síntomas, tratamiento y contagio
Ver fichas de Gatos
La leucemia felina es una enfermedad infectocontagiosa especialmente grave y común provocada por el virus FeLV o virus de la leucemia felina, que genera en el animal un cuadro grave de inhibición de uno o más componentes del sistema inmunitario, anemia severa e incluso el desarrollo de tumores malignos. Todo ello provoca que las defensas del gato bajen y corra un mayor riesgo de contraer todo tipo de infecciones y complicaciones.
En ExpertoAnimal queremos hablar en detalle de la leucemia en gatos al tratarse de una de las patologías más extendidas que cuenta con un pronóstico reservado. A continuación te explicaremos qué es la leucemia felina realmente, cómo se contagia y cuáles son los síntomas más comunes. Así mismo, te hablaremos del diagnóstico, el tratamiento veterinario y las medidas de prevención que podemos seguir para proteger a nuestros gatos.
- El virus de la leucemia felina
- ¿Cómo se contagia la leucemia en gatos?
- Síntomas de la leucemia felina
- Enfermedades de los gatos con leucemia
- Diagnóstico de leucemia en gatos
- ¿Cómo curar la leucemia en gatos? - Tratamiento
- ¿Cómo prevenir la leucemia felina?
- Esperanza de vida de un gato con leucemia felina
El virus de la leucemia felina
La leucemia felina es una enfermedad provocada por el virus de la leucemia felina (FeLV), un retrovirus que pertenece a la familia Oncovirinae. Los oncovirus provocan diversas afecciones inmunológicas, degenerativas e incluso proliferativas. Pueden ser endógenas o exógenas. En este segundo caso son capaces de replicarse cuando se produce la transmisión de FeLV, como el virus del sarcoma felino (FeSV), un tipo de tumor maligno que se produce en los tejidos blandos. Dentro del FeLV encontramos cuatro subgrupos, no obstante, prácticamente todos los felinos infectados han sido contagiados por el FeLV-A. De forma resumida, se caracterizan por:
- FeLV-A: es la forma original del virus, aunque se pueden desarrollar formas mutadas.
- FeLV-B: predispone al felino a padecer neoplasias (crecimientos anormales del tejido).
- FeLV-C: asociado al desarrollo de hipoplasia eritroide y anemia grave.
- FeLV-T: predispone a la infección y a la destrucción de linfocitos T.
Los subgrupos se pueden detectar a través de las distintas pruebas para el diagnóstico que mencionaremos más adelante en su apartado específico. A continuación hablaremos del contagio.
¿Cómo se contagia la leucemia en gatos?
El virus de la leucemia felina se contagia principalmente durante el embarazo de la gata, dentro del útero y en el periodo de lactancia, pero, también, mediante los fluidos corporales, tales como saliva, orina, sangre o secreciones nasales. El aseo mutuo, el uso de la misma caja de arena o de los platos de comida, además de las peleas que causan heridas externas sangrantes, exponen a los gatos sanos a contagiarse del virus.
Todos los felinos son susceptibles de contraer el virus de la leucemia felina, no obstante, los cachorros y los gatos jóvenes son los más vulnerables a padecerlo, especialmente cuando hablamos de felinos domésticos que tienen acceso al exterior, principalmente machos no castrados o que sufren otras afecciones (como enfermedades respiratorias, orales y abscesos) o de los gatos sin hogar, como gatos abandonados y gatos ferales. Así pues, la leucemia en gatos es contagiosa y especialmente grave, por lo que es muy importante prevenirla y tomar las medidas pertinentes para evitar que nuestro felino la contraiga.
¿La leucemia felina se contagia a humanos?
Una de las mayores preocupaciones de los tutores es saber si la leucemia en gatos se contagia a humanos. Estudios realizados han utilizado diversas cepas del FeLV para cultivarlas en tejidos humanos y demostrar si existía o no un riesgo potencial de transmisión a las personas. De momento, los estudios señalan que no existen riesgos para las personas y ni ningún caso conocido que pueda demostrar que se trata de una enfermedad zoonótica.
Síntomas de la leucemia felina
Los síntomas de leucemia en gatos son especialmente variados y dependen, en gran medida, del estado de cada individuo. Es frecuente observar diversos problemas de salud a la vez, dificultades para superarlos y, de forma progresiva, el estado de salud en general empeora. Los signos clínicos más comunes son:
- Fiebre.
- Cansancio.
- Anemia.
- Anorexia.
- Letargia.
- Somnolencia.
- Pérdida de peso.
- Convulsiones.
- Lesiones en la piel.
- Problemas renales, respiratorios o gastrointestinales.
- Debilidad.
- Neoplasias.
- Diarrea.
- Inflamación de los ganglios linfáticos.
- Estomatitis y gingivitis.
- Infecciones bacterianas y virales.
- Ictericia.
- Pelaje en mal estado.
- Falta de aseo.
- Eliminación fuera del arenero.
- Hipotermia.
- Dolor.
- Pérdida de dientes.
- Deshidratación.
Etapas de la leucemia felina
Cuando el virus de la leucemia felina entra en contacto con el sistema inmune del gato pueden darse dos situaciones. Por una parte, si el gato es inmunocompetente, será capaz de eliminar completamente el virus, que no llegará a diseminase por su organismo. Pero cuando el gato no es inmunocompetente, el virus va a conseguir replicarse y diseminarse, con lo que podremos encontrar diferentes casos:
- Viremia primaria: el gato muestra signos de la enfermedad y resulta contagioso para otros gatos. Es una fase en la que puede permanecer hasta un año.
- Virémico transitorio: después de la etapa de viremia primaria existe la posibilidad de que el gato elimine el virus antes de que llegue a la médula ósea. Son gatos que consiguen desarrollar una respuesta inmune que los protege, pero no para toda la vida, por eso se recomienda vacunarlos una vez al año.
- Virémico persistente o viremia secundaria: en este caso, los gatos no consiguen eliminar el virus, que llega a la médula ósea, circula por todo el organismo y puede mantenerse durante años. Hay niveles máximos del virus en la sangre.
- Portador latente en médula ósea: cuando el virus llega a la médula puede desaparecer de la sangre, pero seguirá presente en el organismo del gato. En esta etapa es infeccioso, pero la infección, ahora latente, se podría reactivar en situaciones de elevado estrés o inmunosupresión. Por suerte, cuanto más dure la latencia, menos probable es que el virus se reactive. Por eso la latencia se considera un método de eliminación del virus. En cualquier caso, pueden detectarse signos clínicos.
- Gatos discordantes: por último, hay gatos donde el virus no está ni en la sangre ni en la médula, sino que se localiza en órganos en los que puede replicarse intermitentemente o quedarse en latencia.
Enfermedades de los gatos con leucemia
Como te hemos explicado, los gatos que padecen el virus de la leucemia felina son susceptibles de contraer diversas enfermedades y condiciones. Algunas de las más comunes son:
- Anemia.
- Linfoma medianístico, multicéntrico o espinal.
- Fibrosarcoma.
- Exostosis cartilaginosa múltiple.
- Gingivoestomatitis proliferativa ulcerativa.
- Leucemia linfoide.
- Infecciones progresivas.
- Inmunosupresión.
- Inmunodeficiencia.
- Oncogenicidad.
- Vasculitis sistémica.
- Glomerulonefritis.
- Poliartritis.
- Reabsorción y muerte fetal.
- Involución placentaria.
- Aborto.
- Endometritis bacteriana.
- Síndrome del gatito desvanecido.
- Enteritis.
- Neuropatía periférica.
- Incontinencia urinaria.
- Anisocoria.
- Midriasis.
- Síndrome de Horner.
- Disfunción nerviosa.
- Ceguera.
- Estomatitis.
- Calcivirus felino.
Diagnóstico de leucemia en gatos
Si has observado uno o más signos clínicos de los mencionados deberás dirigirte a tu veterinario para confirmar la enfermedad. Puede hacerse en unos minutos en la propia clínica mediante el test de leucemia felina, que solo necesita unas gotas de sangre. Es habitual que el especialista recomiende realizar esta prueba tras la adopción de un gato, antes de vacunarlo, si ha estado expuesto al virus o si presenta algún síntoma anormal. Otras pruebas que pueden realizarse son:
- ELISA (ensayo por inmunoabsorción ligado a enzimas): es típica en las clínicas veterinarias. Se recoge una muestra de sangre del gato y se detecta si en ella hay presencia de antígenos. Al cabo de varias semanas hay que confirmar el resultado, ya que no se sabe si la infección es temporal o permanente.
- PCR (reacción en cadena de la polimerasa): detecta el ADN del virus en las células infectadas, ya sea en muestras de sangre o de tejidos. Puede detectar infecciones latentes, pero no es tan accesible como el ELISA.
- IFA (inmunofluorescencia directa): no es útil para detectar estadios iniciales de la enfermedad, pero sirve para confirmar positivos de ELISA. Detecta la presencia del antígeno en células infectadas.
Es posible que, tras realizar la prueba, el veterinario nos sugiera repetirla pasados 30 días, si ha dado negativo pero se sospecha de la presencia de la enfermedad. Además, si nuestro felino tiene acceso al exterior, se aconseja testarlo anualmente. En caso de dar positivo es probable que se soliciten pruebas adicionales.
¿Cómo curar la leucemia en gatos? - Tratamiento
Es muy importante señalar que la leucemia felina no tiene cura. No obstante, dependiendo de la etapa de la enfermedad en la que se encuentre el gato, es posible que pueda llevar una buena vida si recibe atención veterinaria regular y el tratamiento que considere el profesional. Este puede incluir la administración de antivirales y de inmunorreguladores, que ayudarán al felino a obtener cierta protección frente a infecciones secundarias.
También será necesario ofrecerle buenos cuidados, como una dieta específica, bienestar, reducción del estrés y toda la atención veterinaria que necesite al primer signo de enfermedad. En el caso de querer complementar el tratamiento prescrito con otro natural, como vitaminas para gatos con leucemia, consultaremos siempre con el especialista.
Por otro lado, debemos tomar ciertas precauciones para evitar que nuestro gato pueda contagiar a otros. El veterinario nos sugerirá que lo mantengamos en el interior para reducir el riesgo de propagación y, además, valorará la castración para evitar el escapismo derivado de la conducta sexual.
¿Cómo prevenir la leucemia felina?
Dada la potencial gravedad de la leucemia felina, mucho mejor que tratarla es evitar que nuestro gato la contraiga. Para ello lo principal es testar a cada nuevo gato que llegue al hogar para evitar mezclar animales sanos con enfermos y reducir al máximo el estrés de nuestro felino. Para ello hay que proporcionarle un manejo adecuado e implantar medidas de enriquecimiento ambiental. Además, hay otra recomendación esencial: la vacuna.
Vacuna contra la leucemia felina
Existe una vacuna contra la leucemia felina que puede administrar el veterinario como parte del calendario de vacunación del gato. Hay que señalar que esta vacuna no sirve para gatos ya infectados, por eso antes de ponerla hay que asegurarse de que no tiene la enfermedad realizando una prueba de detección.
Esperanza de vida de un gato con leucemia felina
¿Cuánto vive un gato con leucemia felina? El pronóstico de la leucemia en gatos es reservado. Generalmente se produce una alta mortalidad. Sin embargo, podemos ofrecerles una buena calidad de vida durante meses e incluso años. En algunos casos los gatos parecen sanos bastante tiempo, especialmente en individuos adultos. Por el contrario, la patología se desarrolla muy rápido en cachorros.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
Si deseas leer más artículos parecidos a Leucemia felina - Síntomas, tratamiento y contagio, te recomendamos que entres en nuestra sección de Enfermedades víricas.
¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón:
- Hoover, E. A. y Mullins, J. I. (1991). «Feline leukemia virus infection and diseases». Journal of the American Veterinary Medical Association, 199(10), 1287-1297.
- Levy, J. K. y Burling, A. (2019). Feline Leukemia Virus and Related Diseases in Cats - Overview. MSD Manual.
- Levy, J. K. y Burling, A. (2019). Feline Leukemia Virus (FeLV). MSD Manual.
- Louwerens, M., London, C. A., Pedersen, N. C. y Lyons, L. A. (2005). «Feline lymphoma in the Post—Feline leukemia virus era». Journal of veterinary internal medicine, 19(3), 329-335.