Mi perro no puede defecar, ¿qué puedo hacer?
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En este artículo de ExpertoAnimal vamos a hablar de un problema que puede padecer nuestro perro, como es la dificultad para defecar. En ocasiones, sobre todo en perros a los que les gusta ingerir todo lo que encuentran a su alcance, se van a producir unas heces que pueden convertirse en problemáticas a la hora de su expulsión. En otros casos, la imposibilidad para defecar va a requerir una rápida atención veterinaria, pues, como veremos, podríamos estar ante una obstrucción. Si te preguntas por qué tu perro no puede defecar veremos, a continuación, las causas principales y qué puedes hacer.
El sistema digestivo del perro
Cuando un perro se mete comida en la boca y la traga se conforma un bolo alimenticio que desciende por el esófago hasta el estómago y, posteriormente, el intestino delgado y el grueso. Una vez aprovechados todos los nutrientes, los residuos van al recto para ser expulsados por el ano. Rodeándolo justo antes de su salida se encuentran las glándulas anales que van a liberar un líquido que les proporciona a las heces el olor particular del perro. Cualquier problema que se produzca en este tránsito intestinal puede hacer que el perro no pueda defecar. De la causa va a depender qué podremos hacer.
¿Cómo saber si mi perro no puede defecar?
Antes explicar las causas principales, resulta importante hablar de los síntomas del estreñimiento en perros. Pues bien, el signo principal que observaremos en el animal es la clara dificultad para expulsar las heces. De esta forma, veremos cómo el perro intenta defecar y no puede, haciendo fuerza e, incluso, llorando. Además, notaremos los siguientes síntomas:
- Heces más duras, con alteración de la coloración.
- Dolor al defecar.
- Sangre en las heces o en el ano.
- Abdomen inflamado.
- Pérdida de apetito.
- Vómitos.
- Temblores.
- Pérdida de peso.
Si definitivamente tu perro no puede defecar, sigue leyendo para intentar averiguar la causa subyacente y acudir al veterinario con toda la información posible.
Mi perro no puede defecar y llora, ¿por qué?
En ocasiones, las heces son muy escasas y compactas, el perro presenta problemas para evacuarlas o, directamente, no defeca por distintos motivos como una dieta inadecuada o una deshidratación. De esta forma, se observa un claro cuadro de estreñimiento en el animal que debe tratarse inmediatamente.
Por ejemplo, si nuestro perro ha ingerido huesos, estos tendrán que ser eliminados, formando unas heces blanquecinas, muy duras, en las que será posible diferenciar fragmentos de huesos. Es fácil, en estas situaciones, que observemos a nuestro perro hacer esfuerzos evidentes. El perro no podrá defecar e, incluso, llorará. También es posible que el perro no pueda defecar y sangre por el ano debido a las lesiones producidas por unas heces tan duras en la mucosa del recto. Estos casos suelen resolverse solos, no obstante, si te preguntas qué hacer si tu perro no puede defecar, a continuación de lo explicamos.
¿Qué hacer si mi perro no puede defecar por estreñimiento?
Si observamos heces a medio salir podemos extraerlas, con suavidad, tirando de ellas. Si notamos cualquier resistencia debemos parar y consultar con nuestro veterinario y, por supuesto, evitar o limitar el consumo de huesos. Si las heces compactadas se deben a deshidratación es probable que observemos más síntomas. Son casos que requieren intervención veterinaria.
Ahora bien, si un perro no puede defecar ni orinar debemos trasladarlo urgentemente al veterinario ya que se trataría de una urgencia. La vida de un perro que no orina corre serio peligro. Una dieta adecuada favorecerá el correcto tránsito intestinal, lo mismo que el adecuado aporte de agua. A veces, tumoraciones, abscesos, crecimientos o agrandamientos en la zona anal, en las glándulas o en la próstata pueden estar detrás de dificultades en la defecación y, también, van a necesitar atención veterinaria.
Para casos de estreñimiento leves, podemos aplicar los siguientes remedios: "Remedios caseros para el estreñimiento en perros".
Mi perro no puede defecar y vomita - Problemas digestivos
En algunos casos el perro no puede defecar porque se ha producido una obstrucción en el tracto digestivo que se hace cuando el perro ingiere un objeto que acaba por atascarse, como puede ser una pelota, un juguete o, nuevamente, un hueso. En una situación así el perro podría no defecar y sí vomitar o no puede defecar y tampoco quiere comer, es decir, lo notaremos molesto. Requiere intervención veterinaria porque hay que determinar dónde se encuentra el objeto para saber si podrá salir o deberá ser extraído mediante cirugía, ya que la obstrucción puede ser parcial o completa.
Para evitar estas situaciones debemos mantener a nuestro perro en un entorno seguro, alejado de objetos peligrosos que puedan ser ingeridos. También tenemos que controlar el estado de sus juguetes. Si alguno está roto es recomendable sustituirlo para que el perro no se pueda tragar ningún trozo. Insistimos en las precauciones a la hora de ofrecerle huesos.
Otras causas de estreñimiento en perros
A veces un perro no puede defecar porque padece alguna patología que afecta a su motilidad intestinal, como puede ser el hipotiroidismo. También debemos tener en cuenta que las colitis, es decir, la inflamación del colon, puede confundirse con estreñimiento, ya que entre sus síntomas destacan la evacuación dolorosa, los esfuerzos prolongados para defecar o la expulsión de pequeñas deposiciones con presencia de sangre.
Estas afecciones van a requerir tratamiento veterinario. En vista de que las causas de que un perro no pueda defecar son varias, es obligado consultar con nuestro veterinario antes de iniciar cualquier tratamiento laxante por nuestra cuenta.
Mi perro no puede defecar y tiembla - Impactaciones fecales
Por último, las heces endurecidas que forman masas en el recto o en el colon reciben el nombre de impactaciones fecales. Estas se forman por distintas causas, como la hiperplasia de próstata, ya mencionada, y pueden estar detrás de que nuestro perro no pueda defecar y tiemble, se mantenga encorvado por las molestias que siente y, además, puede dejar de comer, vomitar o tener el abdomen distendido.
En estos casos no podemos hacer más que acudir al veterinario, ya que en las impactaciones más graves es necesario administrar fluidoterapia y extraer la masa con anestesia. Los casos leves pueden resolverse con enemas o laxantes que deben ser prescritos por el veterinario. Una dieta y ejercicio adecuados van a facilitar el tránsito intestinal. En perros con tendencia al estreñimiento puede ser necesario alimentarlos con comida húmeda o remojando el pienso en agua.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
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