Enfermedades comunes del perro pug o carlino

Las razas braquicéfalas como el perro pug se caracterizan por poseer una cabeza en forma redonda y un hocico muy corto, además de unos ojos bastante salientes. Teniendo en cuenta estas características, muchas de las patologías que le pueden afectar se encuentran relacionadas con este síndrome y, por ello, a continuación nombramos las más comunes.

Los perros pug o carlinos presentan los ollares más estrechos de lo normal, la nariz acortada, el paladar blando elongado y un estrechamiento de la tráquea. Todo ello hace que sufran disnea (dificultad para respirar), la cual se comienza a manifestar desde cachorros con los característicos ronquidos. Al igual que con otros perros braquicéfalos, hay que tener mucho cuidado con los golpes de calor, sobre todo por las características anatómicas de las que hemos hablado.

Agentes infecciosos como los que generan la traqueobronquitis infecciosa canina o tos de las perreras afectan más a nuestros carlinos que a otras razas de perros debido a su condición braquicéfala. De esta forma, hemos de estar atentos y vigilar que nuestro carlino no presente tos, respiración forzosa, intolerancia al ejercicio y dificultad para tragar.

Los carlinos poseen los globos oculares prominentes, por lo que son más propensos a sufrir úlceras corneales tanto por lesiones con objetos como con los propios pelos que contienen sus pliegues faciales, siendo esta una de las enfermedades oculares más comunes en los pug. Además, pueden tener los párpados vueltos hacia dentro, lo que se denomina entropión, y el cual contribuye a las úlceras.

Genéticamente están predispuestos a padecer queratitis pigmentaria inmunomediada, en la cual se observa pigmento de color marrón (melanina) en la superficie del ojo. Otra de las enfermedades oftalmológicas del perro pug es el prolapso de la glándula de la membrana nictitante, el cual muchas veces solo se puede corregir mediante cirugía.

Los perros pug son una de las razas con más predisposición a padecer displasia de cadera. Se trata de una enfermedad del desarrollo del perro en la que existe una incongruencia entre la cabeza del fémur y el acetábulo de la cadera, es decir, no “encajan” correctamente. Esta condición establece una continua inflamación y dolor, provocando una artrosis. Para prevenir la progresión de la artrosis es muy recomendable suplementar a nuestro carlino con condroprotectores. A partir de los seis meses, se puede diagnosticar de displasia realizándole una radiografía.

La luxación patelar o luxación de la rótula también es otra de las enfermedades comunes en el perro pug o carlino dedido a una hendidura poco profunda de la tróclea. La rótula se sale de la tróclea y provoca dolor y cojera en nuestro perro.

Se debe evitar emplear como reproductores a los perros con problemas ortopédicos como los mencionados, no solo para prevenir transmitir dichas patologías a sus sucesores, sino también para evitar que la afección existente en el perro adulto se agrave.

Al tener el pelo corto y bastantes pliegues, los perros pug son propensos a tener dermatitis, por lo que es muy importante mantener una correcta higiene de su piel. Así mismo, también acostumbran a ser susceptibles a padecer tiña, una enfermedad fúngica infecciosa y muy contagiosa.

Por otro lado, también pueden sufrir alergias a componentes ambientales o alimentarios, de manera que deberemos estar atentos a cualquier anomalía que podamos observar en su piel para acudir al veterinario lo antes posible. Además, debemos llevar a cabo una correcta pauta antiparasitaria externa para evitar dermatosis parasitarias como la sarna en perros, así como una posible infestación por pulgas o garrapatas.

Aunque las patologías anteriores acostumbran a ser las más comunes en estos perros, no son los únicos problemas que pueden presentar. Los pug son perros con bastante apetito, por lo que hay que racionarles la comida para evitar la aparición de sobrepeso y todas las consecuencias que esta condición supone. Así, no se recomienda sobrealimentar al carlino, puesto que debido a su apetito insaciable pueden convertirse en canes obesos en muy poco tiempo, hecho que no solo provoca una reducción de su esperanza de vida, sino que incrementa las probabilidades de padecer algunas de las enfermedades mencionadas. Para saber si tu perro sufre obesidad, no te pierdas el siguiente artículo: "¿Cómo saber si tu perro está gordo?".

Por otro lado, muchas de las hembras embarazadas necesitan ser sometidas a una cesárea debido al pequeño tamaño de sus caderas y el tamaño más grande de las cabezas de los cachorros. De esta forma, recomendamos reflexionar previamente acerca de si es realmente necesario exponer a la perra a todo este proceso.

Una grave enfermedad común en el perro pug o carlino que es de origen desconocido es la meningoencefalitis necrotizante, patología que daña el sistema nervioso del can. También afecta a otras razas y se observan síntomas de afección cerebral.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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